Turquía podría reactivar su comercio con Israel en caso de que el cese de hostilidades en Gaza se mantenga de forma permanente, afirmó el martes Nail Olpak, presidente de la Junta de Relaciones Económicas Exteriores de Turquía (DEIK).
La interrupción del comercio entre ambos países ocurrió en 2023, cuando Turquía reaccionó a la guerra en Gaza, iniciada el 7 de octubre de ese año con un ataque de Hamás contra Israel que dejó 1.200 muertos, en su mayoría civiles. Actualmente, Israel y el grupo terrorista están llevando a cabo un complejo acuerdo de alto el fuego.
El gobierno turco justificó inicialmente la suspensión comercial señalando que esta medida permanecería vigente hasta que Israel garantizara un flujo constante y suficiente de ayuda humanitaria hacia Gaza.
El exministro de Asuntos Exteriores de Israel, Israel Katz, cuestionó esta decisión, acusando al presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, de actuar como “un dictador” que desatiende los intereses de los ciudadanos y empresarios de Turquía, así como los acuerdos comerciales internacionales.
Ambos países mantienen un acuerdo de libre comercio desde mediados de la década de 1990, con un intercambio comercial que alcanzó los 6.800 millones de dólares en 2023.
El domingo, primer día de vigencia del alto el fuego, ingresaron más de 630 camiones de ayuda humanitaria a Gaza, según informó Antonio Guterres, secretario general de las Naciones Unidas, al Consejo de Seguridad. Durante la guerra, Israel responsabilizó a Hamás y a la falta de coordinación de las agencias internacionales por los retrasos y saqueos que impidieron la llegada de cientos de convoyes de ayuda.
Este martes, la ONU confirmó que no se han registrado incidentes de saqueos desde la implementación del cese al fuego.
Turquía se ha mostrado como uno de los principales críticos de Israel durante la guerra, con Erdogan calificando al país como un “estado terrorista” y acusándolo de llevar a cabo un “genocidio” contra los palestinos en Gaza. Además, el mandatario ha defendido a Hamás, catalogado como grupo terrorista por Israel, Estados Unidos y la Unión Europea, describiéndolo como un “movimiento de liberación”.
Las relaciones diplomáticas entre Turquía e Israel, que habían sido normalizadas en 2022 con el nombramiento de embajadores tras años de tensiones, se deterioraron nuevamente a raíz de la guerra en Gaza.