El país apuesta por la exploración offshore para reducir su dependencia energética. Empresas extranjeras iniciarán perforaciones en 2026, pese a preocupaciones ambientales.
Uruguay reabre la exploración de petróleo y gas en sus aguas
Tras años sin hallazgos significativos, el gobierno uruguayo ha decidido impulsar la exploración de petróleo y gas en su plataforma marítima. Para ello, ha permitido la entrada de grandes petroleras extranjeras, confiando en la posibilidad de encontrar reservas que reduzcan su dependencia de las importaciones.
Uruguay, ubicado entre Brasil, Argentina y el Atlántico Sur, cuenta con una población de 3,4 millones de habitantes. A pesar de ser uno de los países más desarrollados de América Latina, enfrenta problemas económicos que afectan a gran parte de su población. En particular, la crisis del costo de vida ha incrementado la preocupación del gobierno por garantizar la seguridad energética del país.
En 2022, el petróleo representó el 43,6 % del suministro energético total del país, pero solo el 8,9 % de su generación eléctrica. Uruguay depende casi por completo de las importaciones de crudo, que en 2023 alcanzaron un valor de 1.070 millones de dólares, convirtiéndose en el producto más importado del país. La nación importa alrededor de 50.000 barriles diarios, principalmente de Nigeria, Estados Unidos, Brasil y Argentina.
Ante este panorama, el gobierno ha decidido evaluar la viabilidad de desarrollar su propia industria de combustibles fósiles. Este cambio de estrategia busca reducir la vulnerabilidad energética y los costos asociados a la importación de petróleo.
El modelo de Namibia inspira la exploración uruguaya
A pesar de no haber encontrado petróleo en el pasado, Uruguay ve en el reciente hallazgo de 11.000 millones de barriles en Namibia un indicio alentador. Este país africano, que estuvo unido geológicamente a Uruguay en la era de Pangea, ha despertado el interés de los uruguayos por la similitud de sus formaciones geológicas.
Santiago Ferro Castelli, gerente de transición energética de Ancap, explicó que las condiciones geológicas de Uruguay y Namibia son comparables. Según estimaciones de Ancap, las probabilidades de encontrar petróleo o gas en las áreas marinas uruguayas varían entre un 3 % y un 23 %.
El gobierno ha otorgado contratos de exploración a siete empresas internacionales, entre ellas Apache (EE. UU.), YPF (Argentina) y Shell (Reino Unido). Se prevé que las perforaciones comiencen en 2026, en un área marítima de 120.000 km².
Uruguay y su nueva apuesta petrolera en cifras
- 97,6 % del petróleo consumido en Uruguay es importado.
- El país importó 1.070 millones de dólares en crudo en 2023.
- Las perforaciones exploratorias comenzarán en 2026.
- 120.000 km² del territorio marítimo uruguayo serán explorados.
- Empresas como Shell, YPF y Apache liderarán la exploración.
América Latina vive un auge de exploración petrolera
La decisión de Uruguay sigue la tendencia de otros países de la región, como Guyana y Surinam, donde las grandes petroleras han iniciado proyectos en busca de crudo. Expertos consideran que esta región podría convertirse en un nuevo polo petrolero y competir con Venezuela en la producción de hidrocarburos.
No obstante, la iniciativa ha generado críticas debido a la trayectoria de Uruguay en energía limpia. En 2022, más del 90 % de su electricidad provino de fuentes renovables, lo que convierte al país en un referente mundial en este ámbito.
El cambio de enfoque del gobierno ha causado sorpresa, pues contradice los esfuerzos previos por fortalecer la energía renovable. Aun así, las autoridades justifican la exploración como una estrategia para fortalecer la independencia energética y diversificar la matriz productiva.
El pasado energético de Uruguay y el temor al retroceso
Durante el mandato del expresidente Tabaré Vázquez, Uruguay enfrentó una crisis energética debido a la dependencia del petróleo importado. Ante esta situación, el físico Ramón Méndez Galain lideró un ambicioso plan para impulsar la energía renovable.
Gracias a esta estrategia, Uruguay logró construir 50 parques eólicos y expandir su capacidad hidroeléctrica en menos de una década. Aunque en sus inicios hubo escepticismo sobre la viabilidad del plan, el tiempo demostró su éxito, posicionando al país como un modelo de desarrollo sostenible.
Galain recordó: “Nadie creía que pudiéramos lograrlo. Necesitábamos hacer las cosas de manera diferente… Hoy, incluso los miembros de ese gabinete me dicen: ‘Cuando hablabas en televisión en 2008, pensábamos: ¿cómo vamos a explicar esto cuando fracasemos?’”.
Desafíos legales y económicos de la exploración offshore
Además de las preocupaciones ambientales, la falta de regulación en el sector del petróleo y gas en Uruguay representa un desafío significativo. El país no cuenta con un marco legal sólido para el desarrollo de estos proyectos, lo que podría exponerlo a riesgos ante las petroleras extranjeras.
Ante este vacío normativo, algunos sectores instan al gobierno a establecer una legislación clara antes del inicio de las perforaciones. Sin regulaciones adecuadas, las compañías podrían operar sin restricciones, generando posibles impactos económicos y ambientales negativos.
A pesar de estas preocupaciones, el gobierno ve en la industria petrolera una oportunidad para fortalecer la economía y atraer inversiones en energía verde. Grandes petroleras buscan diversificar sus carteras y podrían interesarse en proyectos como el hidrógeno verde y otras energías renovables.