Se ha escrito mucho sobre cómo Turquía utiliza las mezquitas, los imanes y las asociaciones para influir en la vida religiosa y cultural de Europa. No se ha escrito lo suficiente sobre el plan de Recep Tayyip Erdogan para apoyar a los partidos políticos emergentes en Europa.
Bulgaria
El presidente turco acaba de recibir a una delegación del Movimiento por los Derechos y las Libertades (MRF), un importante partido de Bulgaria. Esto ocurrió el domingo 6 de junio. Erdogan estuvo acompañado por el ministro turco de Asuntos Exteriores, Mevlüt Çavuşoğlu, y por representantes de su partido. El MRF obtuvo el 20% de los votos en las elecciones europeas y el 10% en las nacionales.
Suecia
En agosto de 2019, Mikail Yüksel, un político sueco de origen turco, fundó un nuevo partido llamado “Nyans”. Acusado de conexiones con los Lobos Grises, a los que pertenece su padre, y socio de coalición del AKP de Erdogan, hoy Yüksel quiere entrar en el Parlamento de Estocolmo. Además de los vínculos con islamistas ya conocidos en Suecia, como el ex ministro de Construcción Mehmet Kaplan y el activista Yasri Khan (ex Partido Verde), la plataforma Nyans quiere que se castigue la “islamofobia”.
“Queremos que la islamofobia sea declarada delito, queremos que los musulmanes sean reconocidos como minoría en la Constitución”, declaró Yüksel al periódico progubernamental turco Daily Sabah. Nyans tiene muchas posibilidades de obtener representación política y empezará por participar en las elecciones de 2022.
Los Países Bajos
Denk, el partido fundado por Tunahan Kuzu y Selçuk Öztürk, llevó tres diputados al Parlamento holandés en marzo de 2021. El partido no oculta su afinidad con Turquía: las críticas a este país son tabú, así como su negativa a hablar del genocidio armenio. El periodista holandés Kleis Jager resume el partido holandés pro Erdogan en Le Figaro de la siguiente manera: “En Rotterdam, donde una quinta parte de los votantes son musulmanes, se ha creado un partido islámico que defiende a los holandeses de origen turco y propaga las ideas de Erdogan. Este partido apoya plenamente la política de Erdogan, se interesa casi exclusivamente por los temas relacionados con la comunidad turca e interviene muy poco fuera de estos temas. En concreto, ha hecho campaña a favor de la fundación de escuelas turcas en los Países Bajos. El partido propone una política económica de izquierdas, pero su discurso es extremadamente selectivo: prácticamente solo denuncia la islamofobia y la hostilidad hacia las comunidades de inmigrantes”.
Francia
Nagib Azergui acaba de fundar la Unión de Demócratas Musulmanes de Francia (UDMF), que presenta ocho listas en las elecciones regionales de finales de junio. El eslogan dice mucho de las intenciones del partido: “Todos unidos contra la islamofobia”. El partido ha presentado a miembros de una antigua lista vinculada a Erdogan. El semanario Marianne, en una investigación, lo calificó como “el caballo de Troya del Islam político”.
Europa ha estado estos días ocupada hablando con Erdogan en la cumbre de la OTAN. En cambio, debe despertar y luchar contra este intento turco de infiltrarse a través de sus democracias.