La fiscal jefe de la Corte Penal Internacional, Fatou Bensouda, anunció el viernes que está dispuesta a investigar si Israel está cometiendo “crímenes de guerra” en los “territorios” palestinos.
Aunque la nativa de Gambia ha tenido una larga y distinguida carrera, muchos no conocen algunos detalles interesantes sobre su fructífero pasado. Por ejemplo, fue asesora legal de uno de los dictadores más despiadados del mundo.
Y lo que es más importante, Bensouda fue considerada en su día como una firme aliada del Estado de Israel. En 2010 se enfrentó a una inmensa presión para que investigara a Israel tras la incursión de la flotilla de Gaza que dejó nueve activistas extranjeros muertos en uno de los barcos y 10 soldados de las FDI heridos.
Una vez más, luchó contra la presión extrema para que se investigara a Israel en 2014, tras la guerra de Gaza conocida como Operación Borde Protector.
Ministra de Justicia de Gambia
Bensouda, de 58 años de edad, nació en el país africano de Gambia y en 1987 fue nombrada abogada del Estado y directora adjunta de la Fiscalía por el ex primer ministro gambiano Dawda Jawara.
En 1994, un golpe militar llevó a Jawara al exilio y un oficial militar subalterno, Yayah Jammeh, tomó el control del país. El nuevo líder estaba viviendo un estilo de vida fastuoso y decadente, aplastando la oposición, suprimiendo la comunidad LGBT del país y eliminando efectivamente los derechos de las mujeres.
No obstante, Jammeh eligió a Bensouda como su abogada general y asesora jurídica en 1994, cargo que ocupó durante dos años. En agosto de 1998 se convirtió en ministra de Justicia de Gambia, antes de ser destituida en marzo de 2000.
El tiempo que ha pasado bajo el gobierno de Jammeh le ha valido a Bensouda muchas críticas, y muchos la acusan de ignorar las atrocidades cometidas por el dictador gambiano.
Además, hay quienes afirman que el trabajo de Bensouda durante el gobierno de Jammeh no debería haber permitido que se la considerara para un puesto tan prestigioso en La Haya.
Por otro lado, Bensouda es continuamente elogiada por muchos en todo el mundo, incluyendo grupos de derechos humanos, como una firme buscadora de justicia, que trabaja incansablemente para preservar los derechos de las personas, incluso cuando fue parte de una dictadura.