El viernes, los ministros de Asuntos Exteriores de Francia y Reino Unido, Stephane Sejourne y David Lammy, realizarán una visita a Israel para reunirse con su homólogo israelí, Israel Katz. Durante el encuentro, discutirán los esfuerzos para evitar una escalada regional en medio de la creciente tensión, informó el ministerio. Mientras tanto, las fuerzas armadas de Israel permanecen en máxima alerta ante posibles ataques de Hezbolá e Irán.
La reunión entre Katz, Lammy y Sejourne se centrará en avanzar hacia un acuerdo sobre los rehenes. Además, Katz planea impulsar la imposición de sanciones más severas contra Irán debido a sus programas nucleares, de misiles y de drones.
Aunque los Ministerios de Asuntos Exteriores de Reino Unido y Francia no han confirmado oficialmente la reunión, Sky News citó a una fuente diplomática que verificó el viaje de Lammy.
En una declaración emitida el jueves, Lammy instó a los aliados del Reino Unido en Oriente Medio a optar por la paz en un “momento crucial para la estabilidad global”. Añadió que “las próximas horas y días podrían definir el futuro del Medio Oriente”, reiterando su llamado a un alto el fuego inmediato en Gaza y asegurando que su país empleará “todas las palancas diplomáticas” disponibles para lograrlo.
Por otro lado, el portavoz de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI), el contralmirante Daniel Hagari, mencionó en una conferencia de prensa que el ejército ha incrementado su preparación ante la posibilidad de ataques por parte de Hezbolá e Irán. “Continuamos recopilando información y realizando operaciones en el espacio aéreo libanés, en todos los frentes y a cualquier hora”, afirmó.
Hezbolá e Irán han prometido represalias contra Israel tras la muerte de varios líderes terroristas a finales del mes pasado, aunque todavía no han tomado acciones concretas.
En la región, la atención se centra ahora en una cumbre crítica en Qatar, donde se negocia un cese del fuego y la liberación de rehenes en Gaza. Según funcionarios iraníes, el resultado de estas conversaciones podría influir en sus planes de ataque.
El resultado de estas conversaciones en Doha será un punto clave en la reunión del gabinete de seguridad de Israel prevista para el jueves por la noche en el cuartel general de las FDI en Tel Aviv, según medios israelíes.
El gabinete se reunirá en “el pozo”, la sala de comando subterránea en el cuartel militar de Kirya, por primera vez desde que hace una semana se realizaron simulacros para una posible emergencia, informó el canal de noticias 12. La última vez que se celebró una conferencia similar fue entre el 13 y 14 de abril, cuando Irán lanzó alrededor de 300 misiles y drones contra Israel, la mayoría de los cuales fueron interceptados.
En Doha, un equipo de negociadores de alto nivel, incluyendo al jefe del Mossad, David Barnea, y al jefe del Shin Bet, Ronen Bar, participa en las conversaciones. Aunque no hay representación directa de Hamás, los mediadores árabes están transmitiendo los avances a sus líderes.
El jueves, la administración Biden, un mediador clave en estas conversaciones, pidió a todas las partes involucradas que se mantuvieran en las negociaciones para alcanzar un acuerdo. La Casa Blanca instó a Israel y a Hamás a llegar a un entendimiento, afirmando que aún es posible hacer avances en los próximos días.
John Kirby, portavoz del Consejo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, declaró a CNN que Irán aún no ha renunciado a su amenaza de atacar a Israel, posiblemente a través de intermediarios, y que Estados Unidos sigue monitoreando la situación de cerca, preparado para responder aunque “esperamos que no sea necesario”, indicó.
En una conferencia telefónica aparte, Kirby señaló que aunque no es seguro si Irán llevará a cabo un ataque, es probable que ocurra con poco o ningún aviso.
El presidente estadounidense, Joe Biden, expresó a principios de esta semana su esperanza de que Irán suspenda cualquier ataque si se logra un alto el fuego entre Israel y Hamás. No obstante, los iraníes han repetido su intención de vengar el asesinato de Ismail Haniyeh, líder de Hamás, ocurrido en Teherán el mes pasado, del cual responsabilizan a Israel. Por su parte, Hezbolá ha prometido responder por la muerte de su comandante militar Fuad Shukr en un ataque aéreo en Beirut hace dos semanas.
En preparación para una posible escalada con Hezbolá, la Base Naval de Haifa organizó un ejercicio conjunto esta semana con varias unidades y un hospital, simulando un escenario de guerra en el Líbano. Participaron la 146ª División de las FDI, la Brigada de Búsqueda y Rescate del Comando del Frente Nacional y la Brigada de Infantería de Reserva Oded, además de la Policía de Israel y el Hospital Rambam.
El ejercicio incluyó “escenarios de defensa y ataque en la zona marítima del norte”, como la defensa de la frontera marítima, la evacuación de heridos bajo fuego y otras situaciones de emergencia, según las FDI.
Desde el 8 de octubre, fuerzas lideradas por Hezbolá han atacado casi diariamente a comunidades israelíes y puestos militares a lo largo de la frontera, en apoyo a Gaza en medio de la guerra en curso.