El 30 de noviembre es designado como el Día de Conmemoración para los refugiados judíos de los países árabes e Irán.
En este día se recuerda a los asesinados en las persecuciones del siglo XX y cuyas tumbas no se pueden visitar debido a la imposibilidad de visitar estas tierras, Siria, por ejemplo.
Este año, el día 30 cae en sábado, y en todo el mundo judío, se agregarán oraciones conmemorativas especiales, en memoria de aquellos que murieron pero que no pueden ser visitados.
El rabino Joseph Dweck, líder principal de la comunidad sefardí española y portuguesa en Londres, escribió una oración especial por el día.