El arzobispo de Canterbury, Justin Welby, dice en Jerusalén que no hay razón para suponer que Israel estuvo detrás de la explosión del 17 de octubre en un hospital anglicano en la ciudad de Gaza, y que difundir falsas acusaciones sobre la complicidad israelí es un “libelo de sangre”.
“No asumas que es Israel”, dice Welby a The Times of Israel. “No tenéis pruebas”.
Arzobispo de Canterbury desestima acusaciones sobre Israel
El líder anglicano se encuentra de visita solidaria tras la explosión en el hospital anglicano.
Israel ha presentado pruebas que demuestran que la explosión fue causada por el disparo erróneo de un cohete de la Yihad Islámica. Estados Unidos, citando también sus propios datos, ha respaldado la versión israelí.
Sin embargo, la diócesis episcopal local de Jerusalén emitió un comunicado en el que achacaba “la pérdida de cientos de civiles inocentes” a los ataques aéreos israelíes.
Welby no quiso respaldar esa cifra, limitándose a decir: “No tengo ni idea de cuántos civiles había, he oído muchas cifras diferentes”.
Welby hace estos comentarios tras reunirse con la familia del soldado de las FDI de 22 años y ascendencia británica asesinado, el sargento de primera clase Yosef Malachi Guedalia, y con miembros de la familia Haran, del kibutz Be’eri, ocho de los cuales están desaparecidos o cautivos, y dos de los cuales fueron asesinados el 7 de octubre.