Las Fuerzas de Defensa de Israel dicen que las sirenas que sonaron en las comunidades septentrionales de Dishon y Malkia, cerca de la frontera con Líbano, fueron una falsa alarma.
Las FDI afirman que habían identificado un «objetivo sospechoso» que se dirigía hacia el espacio aéreo israelí, pero que, tras una investigación más detallada, parecía que no había habido infiltración en el espacio aéreo israelí.