Un árabe de Gaza, de 23 años que resultó herido anoche cuando intentó infiltrarse en Israel murió por fuego israelí. También se informó de que 56 árabes resultaron heridos en un intento por destrozar la valla fronteriza con Gaza.
Un dirigente de la organización terrorista Hamás acusó a Israel de “no estar interesado” en los entendimientos dirigidos por Egipto y afirmó que “la resistencia es capaz de frenar cualquier agresión israelí. Las amenazas de los líderes de la ocupación no nos asustan”, en una referencia al Estado Judío.
El islamista Ahmed al-Qarra, de 23 años, había recibido un disparo en el estómago el viernes y luego murió en el hospital.
El viernes, unos 4.500 palestinos intentaron traspasar la valla fronteriza entre Gaza e Israel. Los islamistas lanzaron explosivos, bombas incendiarias y piedras contra vehículos de las Fuerzas de Defensa de Israel que custodian la frontera.
Los intentos masivos por ingresar al territorio de Israel se han llevado a cabo desde marzo del 2018, bajo el apodo de “Marcha del Retorno”. La ley islámica decreta que toda tierra donde hubo presencia musulmana es “patrimonio del Islam a perpetuidad”. Basado en este criterio religioso, la organización islamista Hamás y sus seguidores califican a Israel de “ocupante”, y alegan tener derecho a “retornar” al territorio,
Yahya Sinwar, líder de la organización terrorista con sede en Gaza declaró al inicio de la “Marcha del Retorno” el año pasado que, el objetivo es “ingresar a los hogares judíos y arrancar sus corazones de sus cuerpos”.
Hamás, uno de los grupos terroristas basados en el Corán, que intentan destruir a Israel, tomó el control de Gaza de la Autoridad Palestina en 2007 y desde entonces ha sido el gobernante de facto del territorio.
En el contexto de un frágil alto el fuego, mediado por funcionarios egipcios y de la ONU, Israel tiene la intención de suavizar algunos aspectos del bloqueo del sector a cambio de una calma relativa. Recientemente, Israel también ha permitido que Qatar proporcione pequeños subsidios en efectivo a las familias árabes pobres de Gaza.