Egipto ha diseñado una propuesta para Gaza que marginaría a Hamás y lo sustituiría por administraciones temporales bajo control de Estados árabes, musulmanes y occidentales, según un borrador obtenido por Reuters. Mientras tanto, los países árabes buscan contrarrestar la iniciativa del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, que pretende tomar el control de la Franja y desplazar a sus habitantes.
El plan egipcio, que será debatido en la cumbre de la Liga Árabe el martes, no especifica si su implementación ocurriría antes o después de un acuerdo definitivo para terminar la guerra en Gaza. Tampoco menciona un papel claro para la Autoridad Palestina, que aspira a liderar la reconstrucción de la zona. El documento no aclara cómo se removería a Hamás, cómo se rehabilitaría la Franja ni quién asumiría los costos de su reconstrucción.
Un apartado introductorio del plan advierte que “no habrá fondos internacionales significativos para la rehabilitación y reconstrucción de Gaza si Hamás sigue siendo el actor político y armado predominante en la región”.
Egipto, Jordania y los estados árabes del Golfo llevan casi un mes diseñando una ofensiva diplomática para oponerse al plan de Trump, que ha generado rechazo en el mundo árabe y musulmán. La propuesta egipcia se perfila como la opción más respaldada.
El plan de Egipto rechaza de manera categórica la idea estadounidense de un desplazamiento masivo de palestinos, medida que naciones como Egipto y Jordania consideran una amenaza para su seguridad.
Un funcionario involucrado en las negociaciones, que solicitó el anonimato, compartió el borrador con Reuters, aunque no está claro si los líderes árabes lo respaldarán.
Sami Abu Zuhri, alto dirigente de Hamás, afirmó a Reuters que el grupo desconoce tal iniciativa. “El futuro de Gaza debe ser decidido exclusivamente por los palestinos”, declaró. “Hamás rechaza cualquier intento de imponer proyectos o administraciones no palestinas, así como la presencia de fuerzas extranjeras en la Franja”.
El Ministerio de Relaciones Exteriores de Egipto y la oficina del primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, no respondieron de inmediato a solicitudes de comentarios. Netanyahu ha apoyado el plan de Trump para asumir el control de Gaza, anunciado en una conferencia conjunta en la Casa Blanca en febrero.
El líder israelí ya había descartado cualquier papel de posguerra para Hamás o la Autoridad Palestina, a la que Israel acusa de fomentar el terrorismo. No obstante, hasta la propuesta de Trump, no había definido públicamente quién debería gobernar la Franja tras la guerra.
Fuerza internacional supervisaría la transición en Gaza

El plan de Egipto no menciona elecciones en Gaza ni aborda qué ocurriría si Hamás se niega a desarmarse o abandonar la política. La propuesta plantea la creación de una Misión de Asistencia a la Gobernabilidad, que sustituiría al gobierno dirigido por Hamás durante un período interino sin definir. Este organismo se encargaría de la distribución de ayuda humanitaria y del inicio del proceso de reconstrucción en la Franja, devastada por la guerra.
No se especifica quién asumiría la dirección de esta misión, aunque el documento señala que “se aprovechará la experiencia de los palestinos en Gaza y otros lugares para lograr una recuperación rápida”.
El plan prevé el despliegue de una Fuerza Internacional de Estabilización, integrada principalmente por efectivos de estados árabes, que se encargaría de la seguridad en la Franja mientras se forma una nueva policía local.
Las estructuras de seguridad y gobernanza quedarían bajo la supervisión de una junta directiva compuesta por representantes de Reino Unido, Estados Unidos, la Unión Europea y sus Estados miembros, además de países árabes clave y miembros de la Organización de Cooperación Islámica. Esta junta trabajaría en coordinación con un consejo asesor de la sociedad civil, conformado por académicos, líderes de ONG y otras figuras destacadas.
Para financiar las operaciones, los países miembros de la junta directiva podrían establecer un fondo de apoyo y organizar conferencias de donantes que recauden recursos para la reconstrucción y el desarrollo a largo plazo de Gaza.
Sin embargo, la propuesta no garantiza fondos específicos para la reconstrucción, cuyo costo superaría los 53.000 millones de dólares, según una estimación reciente de Naciones Unidas. Fuentes consultadas por Reuters indican que los estados árabes del Golfo tendrían que aportar al menos 20.000 millones de dólares en la fase inicial del proceso.
Países productores de petróleo y gas como Arabia Saudita, Qatar y Emiratos Árabes Unidos podrían jugar un papel clave en la financiación, pero sus ministerios de Relaciones Exteriores no han respondido consultas sobre su disposición a aportar fondos ni sobre su postura ante el plan egipcio.
Egipto impulsa comité de tecnócratas palestinos para administrar Gaza

Egipto ha intentado establecer un comité interino e independiente conformado por tecnócratas palestinos para gestionar Gaza, en medio de la desconfianza internacional hacia la Autoridad Palestina, considerada débil y necesitada de reformas antes de asumir el control de la Franja.
El mes pasado, un alto asesor del presidente de la Autoridad Palestina, Mahmoud Abbas, declaró a The Times of Israel que cualquier comité de administración debería responder directamente a Ramala. En la misma línea, un funcionario palestino dijo a Reuters que Gaza, al igual que Judea y Samaria, está bajo la jurisdicción de la Autoridad Palestina y debe ser gobernada exclusivamente por palestinos.
“Se ha acordado con Egipto la creación de un comité de expertos palestinos que asistirá a la Autoridad Palestina en la administración de Gaza durante un período de seis meses”, explicó el funcionario, que pidió el anonimato por la sensibilidad del tema. Según él, este comité operará en coordinación con la Autoridad Palestina sin responder a organismos extranjeros.
Por su parte, Hamás ha manifestado su disposición a entregar el control de Gaza a la Autoridad Palestina una vez concluida la guerra.
En 2007, el grupo terrorista expulsó a la Autoridad Palestina de la Franja tras una guerra civil. Desde entonces, con apoyo de Irán, ha construido una extensa red de túneles y una infraestructura militar, gran parte de la cual ha sido destruida por Israel en la actual ofensiva.
la guerra se desató el 7 de octubre de 2023, cuando miles de terroristas de Hamás ingresaron al sur de Israel, asesinando a unas 1.200 personas y secuestrando a 251 rehenes.
Un alto el fuego y un acuerdo de intercambio de rehenes firmado el 19 de enero lograron una tregua temporal, pero la primera fase del pacto expiró el sábado sin avances significativos hacia la segunda etapa. Egipto, uno de los mediadores clave, sigue buscando una solución diplomática.