El acuerdo, mediado por Egipto, está destinado a poner fin a los disturbios violentos que se celebran semanalmente en la frontera entre Gaza e Israel, con el propósito de evitar los ataques con cohetes contra Israel.
Israel, a cambio, reducirá las restricciones en el área de pesca y abrirá gradualmente los cruces de la Franja para permitir el paso de mercancías adicionales.
Posteriormente, Israel aceptará permitir el dinero de Qatar en Gaza. Los fondos están destinados a mejorar la infraestructura de agua, alcantarillado y electricidad del enclave costero.
Se espera que el acuerdo se firme durante los próximos días. Mientras tanto, el líder adjunto de Hamás Saleh al-Arouri enfatizó que “no es un acuerdo de paz”.
Los cruces israelíes de Kerem Shalom y Erez son las principales rutas de entrada y salida de Gaza.
Aunque Israel y Egipto comparten fronteras con Gaza, las autoridades egipcias han mantenido prácticamente sellado el cruce de Rafah desde un ataque terrorista en la península del Sinaí en octubre de 2014. Sin embargo, luego del ataque han reabierto el cruce en diversas ocasiones, principalmente para permitir el paso de personal humanitario.
A principios de este mes, Egipto abrió el cruce para permitir que los habitantes de Gaza viajen a La Meca por primera vez desde 2014.