El grupo terrorista Hamás condiciona su apoyo a un plan árabe de reconstrucción en Gaza a la aprobación de los palestinos, rechazando injerencias externas.
Hamás exige consenso palestino para aceptar cualquier plan
El portavoz de Hamás, Hazem Qassem, afirmó que el grupo solo aceptará un plan liderado por países árabes para la reconstrucción de Gaza si cuenta con el respaldo de los palestinos. Rechazó cualquier intento de fuerzas externas de decidir el futuro de la Franja.
“Nuestra posición es clara: cualquier plan sobre el futuro de Gaza debe alcanzarse mediante un consenso nacional, y facilitaremos este proceso”, declaró Qassem a la agencia Anadolu.
Las declaraciones de Qassem coinciden con una reunión de líderes árabes en El Cairo para discutir un plan de reconstrucción para Gaza. Este proyecto busca contrarrestar una propuesta del expresidente Donald Trump, en la que Estados Unidos asumiría el control de la Franja tras el desplazamiento de la población.
El plan árabe contempla que Hamás entregue el poder a una administración interina compuesta por políticos independientes, en espera de una Autoridad Palestina reformada que asuma el control del territorio.
Netanyahu respalda plan de despoblación propuesto por Trump
Qassem aseguró que Hamás no tiene interés en participar en acuerdos de posguerra ni en formar parte de la nueva administración. “Hamás no necesariamente tiene que estar involucrado en estos acuerdos ni está interesado en hacerlo en absoluto”, afirmó.
El lunes, el primer ministro Benjamin Netanyahu reiteró su respaldo al plan propuesto por Trump, calificándolo como “visionario e innovador”.
El portavoz de Hamás destacó que el grupo no obstaculizará ningún acuerdo alcanzado mediante consenso nacional, siempre que facilite la reconstrucción de Gaza. “Los palestinos pueden encontrar soluciones consensuadas con apoyo árabe para lograr este objetivo”, añadió.
Mientras tanto, el foro de la Liga Árabe, centrado en la reconstrucción de Gaza, sigue en marcha. El encuentro busca ofrecer una alternativa al plan de Trump, que plantea la reubicación de los palestinos en otros países y el control estadounidense sobre el territorio.
Datos clave sobre el plan árabe para la reconstrucción de Gaza
- Los cancilleres árabes se reunieron en El Cairo el lunes en una sesión cerrada para definir un plan que excluya el desplazamiento de la población.
- El borrador del plan, revisado por Reuters, propone sustituir a Hamás con organismos provisionales administrados por países árabes, musulmanes y occidentales.
- No se establece un papel central para la Autoridad Palestina, aunque esta ha manifestado su intención de liderar la reconstrucción.
- El proyecto será sometido a votación en la cumbre del martes, con la participación de jefes de Estado y altos representantes de países árabes.
- El presidente egipcio Abdel-Fattah el-Sissi y el rey de Bahréin, Hamad bin Issa Al Khalifa, darán discursos inaugurales.
Críticas al plan de Trump por el control de Gaza
El rechazo al proyecto de Trump ha sido generalizado en el mundo árabe y entre algunos aliados de Israel y Estados Unidos, quienes condenan la reubicación forzada de los habitantes de Gaza.
Trump propuso convertir Gaza en la “Riviera del Medio Oriente” y trasladar a la población palestina a Egipto, Jordania y otros países vecinos. Más tarde, suavizó su postura asegurando que no impondría el plan, aunque expertos advierten que podría violar el derecho internacional.
Desde 2007, Gaza ha estado bajo un bloqueo por parte de Israel y Egipto, justificado por Israel como una medida para evitar el tráfico de armas hacia Hamás. Esta situación ha llevado a describir la Franja como una “prisión a cielo abierto”.
Guerra en Gaza y estancamiento en negociaciones
El 7 de octubre de 2023, miles de terroristas de Hamás perpetraron un ataque contra el sur de Israel, causando la muerte de aproximadamente 1.200 personas y secuestrando a 251 rehenes. En respuesta, Israel lanzó una ofensiva militar para erradicar al grupo terrorista y rescatar a los secuestrados.
Desde el inicio de la guerra, el Ministerio de Salud de Gaza, bajo control de Hamás, ha informado de más de 48.000 muertes o desapariciones, aunque no diferencia entre civiles y combatientes. Israel sostiene que ha eliminado a 20.000 combatientes hasta enero y a 1.600 terroristas el 7 de octubre.
Las negociaciones sobre el alto el fuego se encuentran estancadas. Durante la primera fase de la tregua, Hamás liberó 33 rehenes israelíes, incluidos ocho muertos, a cambio de casi 2.000 terroristas palestinos encarcelados. Cinco ciudadanos tailandeses fueron liberados en un acuerdo separado.
Israel propuso extender la primera fase de la tregua hasta abril para continuar con la liberación escalonada de los 59 rehenes restantes. Sin embargo, Hamás acusó a Israel de incumplir el acuerdo original y exigió avanzar a la siguiente etapa.
Netanyahu advierte a Hamás sobre represalias
Netanyahu advirtió a Hamás que enfrentará “consecuencias inimaginables” si no libera a los rehenes que aún mantiene en cautiverio.
El líder de Hamás, Osama Hamdan, acusó a Israel de sabotear deliberadamente el alto el fuego y consideró que la insistencia en prolongar la primera fase es una estrategia para evitar negociar la segunda etapa.
Al final de la primera fase, Israel suspendió el ingreso de bienes y suministros a Gaza y amenazó con represalias si Hamás no aceptaba la prórroga de la tregua. Esta decisión generó críticas de los principales mediadores, Egipto y Qatar, así como de Naciones Unidas y gobiernos de la región.
la guerra ha devastado Gaza, dejando la mayoría de los edificios destruidos, a la población desplazada y a miles en riesgo de hambruna, según la ONU.