Fuentes de Hamás dijeron al periódico saudí Asharq Al-Awsat que el plan de la Casa Blanca para poner fin a la guerra “se inclina hacia un lado y crea injusticia”, ya que favorece los intereses israelíes en lugar de los palestinos, aunque añadieron que aun así sería evaluado “positivamente”.
Las fuentes señalaron que no se ha fijado una fecha precisa para la entrega de la respuesta de Hamás al plan, pero los mediadores han pedido al grupo que actúe con rapidez y dé una respuesta en un plazo de unos dos días.
Las fuentes afirmaron que, aunque los puntos del plan se exponen con detalle, no incluyen garantías reales para la aplicación de los términos del acuerdo. Indicaron además que podría ser necesario ajustar el plazo para la liberación de rehenes, incluidos los muertos, porque se requeriría tiempo para ubicar los lugares de enterramiento de los cautivos asesinados dentro de la Franja.
El plan establece que Hamás debe liberar a todos los rehenes en un plazo de 72 horas.
Fuentes de Hamás en la Franja informaron al periódico que, en conversaciones con los dirigentes del grupo en el extranjero, los jefes de Hamás en Gaza subrayaron la importancia de responder de forma positiva al plan para poner fin a la guerra. Según ellos, el ala militar del grupo también coincide con este planteamiento.
