Las tropas israelíes abrieron fuego contra varios atacantes islámicos que intentaron infiltrarse al territorio israelí desde la Franja de Gaza el jueves.
Según el ejército, aproximadamente 200 atacantes palestinos participaron en una oleada de violencia en cuatro ubicaciones principales a lo largo de la cerca de seguridad, encendiendo fuegos y atacando con rocas a los soldados israelíes en el otro lado.
Los soldados atacaron a un grupo de principales hostiles que intentaban derribar porciones de la cerca para infiltrarse en la soberanía israelí, dijo un portavoz del ejército.
No hubo informes inmediatos de heridos por el Ministerio de Salud de Gaza dirigido por la organización terrorista islámica Hamás.
El incidente se suscitó cuando los árabes palestinos en la Franja de Gaza instalaron tiendas de campaña cerca de la frontera con Israel antes de un campamento de protesta de seis semanas bajo la mirada de los cautelosos soldados israelíes.
La oleada de violencia islámica es denominada la «Marcha del Retorno» y cuenta con el respaldo de los gobernantes terroristas de Hamás en la Franja de Gaza. El nombre de esta oleada se basa en el principio islámico de que todo territorio ocupado por musulmanes les pertenece a perpetuidad, por esa misma razón reclaman por ejemplo la península ibérica, a la que denominan Al-Andalus.
La violencia islámica se produce en medio de crecientes tensiones mientras Estados Unidos se prepara para trasladar su embajada en Israel a Jerusalén.
Los organizadores dijeron que sería pacífica, pero en términos islámicos la palabra “paz” se refiere a la guerra contra aquellos a quienes denominan “infieles”.
En una entrevista el miércoles con el diario Israel Hayom, el jefe del Estado Mayor de las FDI, Gadi Eisenkot, advirtió que «si los palestinos piensan que organizarán una marcha y pasarán la cerca [fronteriza] y marcharán hacia nuestro territorio, están equivocados».
«Una gran parte del ejército se invertirá allí», dijo Eisenkot al diario Yedioth Ahronoth, en el mismo día, y agregó que más de un centenar de francotiradores, la mayoría de «unidades especiales», habían sido estacionados en la zona.
«Si hay peligro para las vidas, autorizaremos el fuego vivo», declaró. «Las órdenes son usar mucha fuerza».
La primera oleada de ataques islámicos está programada para comenzar el viernes.
También es, por coincidencia, la víspera del festival de Pascua de una semana.
Se espera que el campamento palestino y la violencia desde la Franja de Gaza continúen hasta mediados de mayo, cuando Estados Unidos inaugure su nueva embajada en Jerusalén.
A mediados de mayo también se conmemorará el aniversario de lo que la Nakba, o catástrofe, en referencia a la creación del Estado de Israel, que vio el desplazamiento de árabes que entonces no se hacían llamar “palestinos”, a causa de las guerras de exterminio de las naciones islámicas contra el recién establecido Estado Judío.