En un acto contra la guerra celebrado en Haifa, Ayman Odeh, líder del partido Hadash-Ta’al, de mayoría árabe, proclamó ante la multitud que “Gaza ha ganado y Gaza ganará”. Sus palabras desataron fuertes críticas desde sectores de la derecha israelí. El evento, que reunió a unas 2.000 personas según Haaretz, incluyó a representantes de 20 organizaciones pacifistas.
Odeh destacó el aislamiento internacional de Israel, al que calificó como “estado paria” en el ámbito global, especialmente en Occidente. “Tras más de 600 días de conflicto, la mayoría de ambos pueblos lamenta que esos días hayan ocurrido”, afirmó. Además, señaló que la guerra representa una derrota histórica para la ideología , que, según él, quedó “aplastada en Gaza”.
El diputado Ahmad Tibi, líder de Ta’al, también intervino en la manifestación. En su discurso, leyó los nombres de los nueve hijos de la familia al-Najjar, quienes, según autoridades de Gaza, murieron en un ataque aéreo israelí la semana previa.
“Cada hora muere un niño en Gaza”, denunció Tibi, exigiendo el cese de los bombardeos y el fin de los crímenes de guerra. Asimismo, calificó a la Knéset como “kahanista”, en alusión a los seguidores del muerto rabino racista Meir Kahane, y comparó la retórica del ministro de Finanzas, Bezalel Smotrich, con la de la Alemania nazi.
Dirigiéndose a los manifestantes antigubernamentales que exigen un acuerdo de alto el fuego para liberar rehenes, Odeh expresó su apoyo, pero subrayó que la ocupación constituye el problema central. “No existe democracia con ocupación”, afirmó. También acusó al gobierno israelí de promover un genocidio y limpieza étnica, declarando: “Se lo diremos a la cara: esto es genocidio, esto es limpieza étnica”.
Las declaraciones de Odeh generaron reacciones inmediatas. Tally Gotliv, diputado del Likud, lo tildó en X de “partidario del terror”, acusándolo de apoyar al enemigo en Gaza. Por su parte, Oded Forer, de Yisrael Beytenu, afirmó que respaldar al enemigo descalifica a Odeh para servir en la Knéset. El ministro de Energía, Eli Cohen, lo llamó “quinta columna” y pidió revocar su inmunidad parlamentaria, sugiriendo su encarcelamiento o traslado a Gaza.
El alcalde de Haifa, Yona Yahav, también condenó los discursos de Odeh y Tibi, afirmando que quienes acusan a Israel de crímenes de guerra y genocidio no son bienvenidos en la ciudad. “Estos manifestantes no buscan paz ni reconciliación, sino incitación y aumento de tensiones”, aseguró, destacando que la convivencia en Haifa no se verá afectada por una minoría extremista.
En respuesta a las críticas, Odeh defendió su postura en X, argumentando que no puede haber victoria sobre miles de niños muertos, familias destruidas y civiles hambrientos. “La derecha llevó a cabo esta guerra por venganza ciega y fue derrotada”, escribió. Insistió en que solo quienes ven a los gazatíes como “terroristas de nacimiento” malinterpretan sus palabras, y reafirmó: “Gaza ganará. La vida vencerá”.
la guerra entre Israel y Hamás comenzó el 7 de octubre de 2023, con un ataque terrorista que dejó 1.200 muertos y 251 secuestrados en Israel. Según el Ministerio de Salud de Gaza, controlado por Hamás, más de 53.000 personas han muerto en los combates, aunque las cifras no distinguen entre civiles y combatientes. Israel asegura haber eliminado a unos 20.000 combatientes en Gaza hasta enero, además de 1.600 terroristas durante el ataque inicial.
El gobierno israelí sostiene que busca minimizar las víctimas civiles y acusa a Hamás de usar a la población como escudo humano, operando desde zonas residenciales, hospitales, escuelas y mezquitas.