Decenas de mantarrayas fueron exhibidas el lunes en una playa de la Franja de Gaza mientras los pescadores palestinos celebraban la captura masiva.
Estos raros peces acuden en masa a las aguas mediterráneas de la costa de Gaza durante su migración invernal, que tiene lugar todos los años en marzo y abril.
La pesca es una importante actividad comercial en Gaza, sometida a un bloqueo desde 2007, cuando el grupo terrorista Hamás tomó el control del territorio en una sangrienta batalla con la Autoridad Palestina.
El pescador Bashir Shoueikh capturó más de 10 rayas, cada una de las cuales pesaba entre 200 y 300 kg.
Se venden a unos 12 shekels (3,30 dólares) el kilo.
“Cada barco transporta entre 20 y 30 de estos peces”, explica Shoueikh a la AFP. “A la gente le gustan mucho”.
Las fotos de la escena mostraban a las enormes criaturas ensangrentadas siendo sacrificadas, descuartizadas y arrastradas en carros tirados por caballos.
Los pescadores declararon que eran conscientes de que las rayas están protegidas, pero afirmaron que el bloqueo les obligaba a capturarlas, según AP.
La zona de pesca frente a Gaza, determinada por Israel, varía de cinco a 16 millas náuticas, dependiendo de la situación de seguridad. A pesar de las restricciones, los pescadores gazatíes han aumentado considerablemente sus capturas en los años transcurridos desde que se instauró el bloqueo.
Israel mantiene el bloqueo para impedir que los terroristas adquieran armas.
Las dos especies de manta raya – manta alfredi y manta birostris – figuran en la lista roja de especies amenazadas de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza debido a la disminución de su número.