El líder de la organización terrorista Hamás, Ismail Haniyeh, pide a los líderes de los países árabes e islámicos que actúen urgentemente para frustrar el plan de Israel de aplicar la soberanía sobre partes de Judea y Samaria.
El dirigente de Hamás escribió una carta a más de 40 Estados en la que los instaba a convocar una cumbre árabe e islámica para expresar su apoyo unánime a la posición palestina y su oposición a todo el “plan de asentamientos”, la anexión y la judaización de Judea, Samaria y Jerusalén, y para “proporcionar una red de protección política y económica al pueblo palestino en su lucha por hacer realidad sus derechos”.
Acusó a Israel de intentar promover la normalización con los países árabes e islámicos para ayudar a realizar la “ocupación de Palestina”.
En este contexto, Haniyeh exigió que se descartara la normalización con el “enemigo israelí”, calificándola de “un gran error que no será perdonado y un cuchillo de traición en la espalda del pueblo palestino”.
Haniyeh subrayó que “el pueblo palestino no se quedaría de brazos cruzados ante la agresión y la escalada” y que se enfrentaría al “terror” israelí con una resistencia total hasta que se cumplieran los objetivos de la eliminación de la “ocupación”, la liberación y el retorno.
Desde el año 2005 no vive ningún judío en la Franja de Gaza, la cual es gobernada por la organización terrorista Hamás. No existe anexión ni ocupación.
El Estado de Israel mantiene un cerco de control sobre lo que ingresa y sale de la franja gobernada por una organización que alaba el exterminio de Israel.