Los 2,5 millones de escolares israelíes comenzarán el curso escolar el jueves por la mañana, después de que el miércoles por la noche se llegara a un acuerdo de última hora para evitar una huelga en los institutos, tras un acuerdo similar alcanzado ese mismo día en relación con los alumnos más jóvenes.
Los 2.496.000 alumnos y 218.000 trabajadores de la educación comenzarán el curso en 5.440 escuelas y 22.050 guarderías de todo el país. Unos 177.000 de los alumnos comenzarán el primer grado y 136.000 el último año de secundaria.
El acuerdo entre el Ministerio de Hacienda y la Asociación de Profesores de Enseñanza Secundaria se anunció alrededor de las 10 de la noche, y los padres y alumnos tuvieron que esperar hasta horas antes del inicio del curso escolar para saber si los estudios comenzarían efectivamente.
Ran Erez, jefe de la Asociación de Profesores de Enseñanza Secundaria, anunció que el Ministerio de Hacienda había atendido sus demandas relativas a la reducción de la semana escolar a cinco días y a la aplicación de reformas en los exámenes de matrícula de bachillerato de humanidades.
Aunque dijo que se habían atendido todas sus demandas, Erez añadió: “He llegado una vez más a la conclusión de que el Ministerio de Hacienda es un campeón en poner las cosas difíciles”.

“Todos los estudiantes del Estado de Israel vuelven mañana a la escuela y abren el curso escolar con alegría y celebración, incluidos los estudiantes de secundaria”, declaró la ministra de Educación, Yifat Shasha-Biton.
El anuncio se produjo horas después de que el Sindicato de Profesores de Israel, que representa a los profesores de guarderías, jardines de infancia y escuelas primarias, anunciara que había llegado a un acuerdo de última hora con el Tesoro tras meses de conversaciones.
El acuerdo, que aún no se ha firmado, durará hasta 2026. Prevé un aumento de los salarios de los profesores y directores, así como primas por rendimiento. También modifica los días de vacaciones escolares para ajustar mejor los horarios de los colegios a los de los padres trabajadores.
Las partes también han acordado un proceso más ágil para el despido de profesores y una espera de tres años para poder optar a la titularidad.
Las últimas semanas del anterior curso escolar se vieron empañadas por las huelgas del sindicato de profesores de Israel en su lucha por una mejora salarial.