El líder del partido Otzma Yehudit, Ben Gvir, ha expresado en un tuit su desaprobación hacia el reciente acuerdo aprobado entre Israel y Hamás.
Lo calificó de “precedente peligroso”, comparándolo con el acuerdo de Gilad Shalit de 2011, donde se liberaron más de 1.000 terroristas a cambio de un soldado de las FDI.
Gvir sostiene que, a pesar de algunas ventajas, es un deber moral recuperar a todos los rehenes, y rechaza la idea de traer solo a algunos de ellos. Criticó el acuerdo por no asegurar la liberación de todas las mujeres y niños retenidos en Gaza, tildándolo de “inmoral, ilógico y muy lejos de ser suficiente”. Afirmó que la situación “podría y debería haber sido diferente”.
Acusó a Hamás de buscar ansiosamente la tregua y de querer “deshacerse” de las mujeres y niños en la primera fase del acuerdo para reducir la presión internacional. Según Gvir, Hamás obtuvo combustible, la liberación de terroristas, la detención de acciones de las FDI y hasta la prohibición de vuelos de reconocimiento.
El político instó a intensificar las operaciones militares de las FDI contra Hamás para presionar por un acuerdo global sobre los rehenes. Indicó que los ministros de su partido votaron en contra del acuerdo “no sin contemplaciones”, considerando todas las opciones disponibles como “malas”.