En medio de crecientes tensiones políticas, el ex primer ministro Naftali Bennett ha pedido al primer ministro Benjamin Netanyahu que reconsidere su decisión de despedir al ministro de Defensa Yoav Gallant y detenga la legislación de la reforma judicial.
“Llamado a la unidad y la fraternidad”
Bennett enfatizó la gravedad de la situación en Israel, comparándola con la Guerra de Yom Kippur, y abogó por la paz y la unidad entre los ciudadanos.
Instó a todos a evitar la violencia y recordar que todos son hermanos en Israel.
Lapid y Gantz: “No jueguen con la seguridad nacional”
El presidente de Yesh Atid, Yair Lapid, y el presidente del Partido de Unidad Nacional, Benny Gantz, también hicieron un llamamiento a los ministros del Likud para que se abstuvieran de aceptar el cargo de ministro de Defensa en lugar de Gallant.
Advierten que la seguridad del país no debe ser objeto de manipulación política y que Netanyahu ha cruzado una línea roja.
El desencadenante: La postura de Gallant sobre la reforma judicial
La destitución de Gallant llegó tras sus comentarios públicos en relación con el plan de reforma judicial, en los que abogó por un enfoque más negociador y unificador.
Gallant afirmó que la victoria de una parte en este tema podría significar la pérdida del Estado de Israel.
A pesar de las tensiones, Netanyahu rechazó la solicitud de Gallant de convocar al Consejo de ministros para debatir las posibles consecuencias del retroceso de las reformas judiciales, lo que llevó a Gallant a emitir su declaración pública.