Israel está vigilando la crisis en el Líbano para asegurarse de que no traspase la frontera, dijo el domingo el primer ministro Naftali Bennett.
“El Líbano está al borde del colapso, como todos los países de los que se apodera Irán”, dijo Bennett en la apertura de la reunión del gabinete del domingo. “Los ciudadanos de Líbano están pagando un alto precio por la toma de posesión iraní del país”.
Israel está “observando la situación de cerca… y seguiremos estando en alerta”, añadió Bennett.
Las declaraciones de Bennett se produjeron después de que las FDI y la policía detuvieran el viernes un intento de contrabando de armas por valor de millones de shekels desde el Líbano a Israel, que según el primer ministro es “uno de los muchos ejemplos”.
La policía y las FDI detuvieron los intentos de contrabando en la aldea transfronteriza de Ghajar, capturando a los sospechosos que llevaban 43 pistolas. Están investigando el incidente, incluida la posibilidad de que esté implicado Hezbolá.
Las FDI y la policía han detenido al menos cinco grandes intentos de contrabando de drogas y armas desde el Líbano este año. La semana pasada, las FDI afirmaron que el alto cargo de Hezbolá, Hajj Khalil Harb, dirige una red de contrabando de drogas y armas en la frontera entre Líbano e Israel.
También la semana pasada, el ministro de Defensa, Benny Gantz, envió a la Fuerza Interina de la ONU en el Líbano una propuesta para que Israel envíe ayuda humanitaria al pueblo libanés en medio del empeoramiento de la crisis económica y humanitaria del país.
UNICEF informó de que el 77% de los hogares libaneses no pueden comprar alimentos, los medicamentos esenciales se han agotado y los cortes de electricidad y gas se han convertido en algo habitual. El Banco Mundial la ha calificado como una de las peores crisis financieras del mundo desde la década de 1850.
“Como israelí, como judío y como ser humano, me duele el corazón al ver las imágenes de gente pasando hambre en las calles del Líbano”, tuiteó Gantz la semana pasada. “Israel ha ofrecido ayuda al Líbano en el pasado, y aún hoy estamos dispuestos a actuar y a animar a otros países a tender una mano amiga al Líbano para que vuelva a florecer y salga de su estado de crisis”.
Se espera que Líbano rechace la ayuda, como hizo el año pasado, después de que una explosión en Beirut matara a docenas de personas e Israel ofreciera ayuda humanitaria y médica.