Ojalá pudiéramos decir que los palestinos fueron “secuestrados” por Hamás y que el propio pueblo realmente busca la paz y la prosperidad, pero los hechos muestran lo contrario:
Una reciente encuesta revela que el 67% de los palestinos apoya la masacre del 7 de octubre. En las elecciones democráticas de la Autoridad Palestina en enero de 2006, Hamás obtuvo la mayoría absoluta con 76 de los 132 escaños del parlamento, mientras que Fatah solo consiguió 48 escaños. Desde entonces, todas las encuestas indican que Hamás volvería a ganar, razón por la cual Mahmoud Abbas ha evitado nuevas elecciones, sabiendo que perdería.
El 7 de octubre, miles de gazatíes participaron en la masacre, asesinando familias, quemando adultos y niños, y violando mujeres. No se ha reportado ni un solo caso de residentes de Gaza que se hayan opuesto activamente a esta violencia. La mayoría de los palestinos no solo apoya estos crímenes horribles, sino que muchos participaron de alguna forma, como utilizando sus hogares para almacenar municiones de Hamás.
¿Por qué es importante esto?
- La verdad siempre importa.
- Para avanzar, primero debemos detener el adoctrinamiento que sufre cada palestino, lo que convierte a muchos en asesinos. Si se les enseña a creer que los judíos son Satán y cerdos, no es sorprendente que salgan a matarlos.
- Ningún plan diplomático puede ignorar esta realidad.
- La afirmación de que “sus duras condiciones” los convierten en asesinos es falsa. Hay miles de millones de personas que viven en la pobreza y en condiciones mucho peores que no se convierten en asesinos. De hecho, los palestinos tienen mejores condiciones que la mayoría de los otros árabes y, antes del 7 de octubre, disfrutaban de un considerable crecimiento económico.
A largo plazo, un paso necesario para el progreso será la des-nazificación de Gaza y gran parte del público palestino. Primero, debemos derrotar a Hamás.