El Mossad y las FDI, con apoyo de EE. UU., dañaron gravemente las capacidades nucleares y de misiles de Irán en 12 días.
Operación León Naciente frena amenaza iraní
En un mensaje público sin precedentes, el Mossad elogió el miércoles la Operación León Naciente, una campaña aérea de 12 días que neutralizó significativamente el programa nuclear y de misiles de Irán. La agencia de inteligencia destacó que la ofensiva, que se ejecutó en cooperación con las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) y con apoyo de Estados Unidos, marcó un hito histórico al reducir una amenaza que ha puesto en peligro la seguridad de Israel durante décadas. Según el comunicado, la operación dejó a Israel como un país más seguro y preparado para enfrentar futuros desafíos.
El jefe del Mossad, David Barnea, afirmó en un video desde un centro de comando operativo que “objetivos que antes parecían imaginarios ahora se han logrado”. Barnea subrayó que la agencia mantendrá la vigilancia sobre los proyectos iraníes, con los que está “íntimamente familiarizada”. También expresó agradecimiento a la Agencia Central de Inteligencia (CIA) por su cooperación, que calificó como fundamental para el éxito de la operación. Por su parte, la CIA, en un comunicado atribuido a su director, John Ratcliffe, confirmó que “un cuerpo de inteligencia creíble indica que el programa nuclear de Irán ha sido severamente dañado”.
La operación, que comenzó el 13 de junio de 2025 y culminó el martes tras la negociación de un alto el fuego por parte de Estados Unidos, tuvo como objetivo desmantelar las capacidades nucleares y de misiles balísticos de Irán. Las fuerzas israelíes atacaron sitios de enriquecimiento de uranio, instalaciones de producción de misiles, y eliminaron a altos líderes militares y científicos nucleares iraníes. Según la evaluación de la Dirección de Inteligencia de las FDI, el daño al programa nuclear iraní no fue localizado, sino “sistémico”, lo que ha provocado un retraso de años en su desarrollo.
El jefe del Estado Mayor de las FDI, teniente general Eyal Zamir, calificó la operación como un “éxito definitivo”. En una declaración el miércoles, afirmó que Israel alcanzó “superioridad de inteligencia, tecnológica y aérea”, y logró operar libremente en el espacio aéreo iraní. Zamir reveló que fuerzas de comando israelíes llevaron a cabo operaciones dentro de Irán durante la campaña, aunque no aclaró si se trataba de unidades del Mossad o de comandos de las FDI. Las FDI se negaron a proporcionar más detalles cuando The Times of Israel solicitó aclaraciones.
Claves de la Operación León Naciente contra Irán
- Duración: 12 días, del 13 al 24 de junio de 2025.
- Objetivos: Instalaciones nucleares, sitios de misiles balísticos, líderes militares y científicos iraníes.
- Daño: Programa nuclear iraní retrasado por años, según inteligencia de las FDI y la CIA.
- Métodos: Ataques aéreos, drones introducidos de forma clandestina, operaciones de comandos en territorio iraní.
- Apoyo: Cooperación de la CIA y respaldo logístico de Estados Unidos.
El rol crucial del Mossad en la ofensiva
El Mossad desempeñó un papel central en la Operación León Naciente. Según informes, agentes de la agencia reclutaron operativos para introducir drones de ataque en Irán mediante camiones, contenedores de envío y maletas. Estos drones, que se ensamblaron dentro del país, destruyeron sistemas de defensa antiaérea y lanzadores de misiles tierra-tierra dirigidos a Israel. Además, el Mossad facilitó el traslado clandestino de vehículos con sistemas de armas, lo que otorgó a los aviones israelíes supremacía aérea durante la campaña.
La operación también incluyó acciones encubiertas de fuerzas de comando, que desactivaron defensas iraníes y misiles balísticos en las primeras etapas. Estas acciones permitieron a Israel operar con libertad en el espacio aéreo enemigo. Zamir destacó que las FDI destruyeron cientos de lanzadores de misiles y provocaron daños significativos a las capacidades de Teherán para reconstruir su arsenal. “No permitiremos que Irán produzca armas de destrucción masiva”, afirmó.
En respuesta a los ataques, Irán lanzó más de 550 misiles balísticos y cerca de 1.000 drones contra Israel, lo que causó la muerte de 28 personas y dejó a miles heridas, según funcionarios de salud iraníes. Los misiles impactaron edificios residenciales, una universidad, un hospital y sitios de infraestructura crítica, lo que provocó daños considerables. A pesar de la respuesta iraní, la inteligencia israelí y estadounidense sostiene que los ataques de Israel alcanzaron sus objetivos estratégicos.
La CIA señaló que nueva inteligencia, obtenida de una fuente “históricamente confiable y precisa”, indica que varias instalaciones nucleares iraníes clave fueron destruidas. Según el comunicado, la reconstrucción de estas instalaciones tomará años. Esta evaluación coincide con la de las FDI, que reportaron que el daño al programa nuclear iraní fue “grave, amplio y profundo”.
Contexto de la operación y cooperación internacional
La Operación León Naciente se planificó durante meses, y el Mossad y las FDI coordinaron esfuerzos para recopilar inteligencia detallada sobre los programas nucleares y de misiles de Irán. La cooperación con la CIA fue crucial, y proporcionó datos y apoyo logístico que hicieron posible ejecutar ataques precisos. La operación marcó un punto de inflexión en la capacidad de Israel para contrarrestar la amenaza iraní, que durante décadas ha sido una prioridad de seguridad nacional.
El alto el fuego, que Estados Unidos negoció y entró en vigor el martes, puso fin a 12 días de combates intensos. Sin embargo, Israel mantiene una postura de vigilancia, y el Mossad sigue comprometido con la supervisión de cualquier intento de Irán por reiniciar sus programas nucleares o de misiles. Barnea destacó que la agencia está preparada para actuar en cualquier momento contra proyectos iraníes que representen una amenaza para la seguridad de Israel.
La operación debilitó las capacidades militares de Irán y también reforzó la percepción de Israel como una potencia regional capaz de llevar a cabo operaciones complejas en territorio enemigo. La combinación de inteligencia, tecnología avanzada y cooperación internacional permitió a Israel alcanzar un nivel de libertad operativa sin precedentes, según Zamir.
El éxito de la Operación León Naciente se atribuye a la planificación meticulosa y a la ejecución coordinada entre el Mossad, las FDI y aliados como la CIA. Aunque Irán intentó responder con ataques masivos, la superioridad aérea y de inteligencia de Israel limitó el impacto de estas represalias.