El Partido Sionista Religioso publicó el miércoles un comunicado en el que dejó claro que no apoyaría un proyecto de ley meramente simbólico y rechazó las declaraciones de apoyo difundidas por la facción haredi Degel Hatorah.
“Los comunicados de prensa no constituyen un plan de acción, ni por parte de Degel Hatorah ni de los miembros de la coalición”, declaró el partido. “Solo aprobaríamos un proyecto de ley que modificara la situación actual y permitiera el reclutamiento de judíos haredíes. El Estado de Israel necesita más soldados. Punto”.
La facción Degel Hatorah, que representa a la comunidad haredi lituana (no jasídica), anunció el miércoles por la mañana que el rabino Dov Lando y el rabino Moshe Hillel Hirsch les autorizaron a avanzar con el proyecto de ley en los comités de la Knéset.
Sin embargo, se señaló que la decisión final se tomará solo después de que el proyecto de ley se presente en su totalidad y se someta a la revisión de los rabinos.
La versión actual del proyecto de ley, impulsada por el presidente del Comité de Asuntos Exteriores y Defensa, el diputado Boaz Bismuth, ha recibido críticas de quienes sostienen que resulta más indulgente que la versión anterior presentada por el diputado Yuli Edelstein.
La facción Agudat Israel, que representa a los jasidim, también manifestó reservas sobre el proyecto de ley. El presidente de la facción, el diputado Yitzhak Goldknopf, aclaró: “Aún no recibí el borrador del proyecto de ley, por lo que no se presentó ante el Consejo de Sabios de la Torá. Queda absolutamente claro: Agudat Israel no apoyará ningún proyecto de ley que incluya sanciones o que perjudique la condición y los derechos de los estudiantes de la Torá tal como se aplicaron hasta hoy”.
