El discurso del vicepresidente Mike Pence ante el Knesset el lunes por la tarde, el primero de un alto cargo estadounidense en una década, fue elogiado por varios funcionarios israelíes de todo el espectro político, quienes destacaron la promesa del vicepresidente de prohibir a Irán obtener armas nucleares y un calendario para la reubicación de la embajada de EE.UU. de Tel Aviv a Jerusalén.
El embajador de Estados Unidos en Israel, David Friedman, sin embargo, expresó una reacción más personal al discurso, diciendo que había estado tan conmovido por el mensaje como para haber sido llevado a las lágrimas.
En un tweet publicado unas horas después de la disertación del lunes, Friedman calificó el discurso de Pence como «extraordinario».
«Asistí a una sesión especial de la Knéset hoy, me conmovió hasta las lágrimas cuando el vicepresidente Pence pronunció su extraordinario discurso. Basándose en el anuncio histórico del presidente Trump, Estados Unidos está volviendo a sus valores fundamentales y abrazando a sus aliados clave».
Durante su discurso, Pence elogió la alianza entre Estados Unidos e Israel, y señaló los lazos culturales entre los Estados Unidos y el Estado Judío.
«En la historia de los judíos, siempre hemos visto la historia de América. Nuestros fundadores recurrieron a la Biblia hebrea en busca de dirección», dijo Pence. «Mañana, cuando esté en Yad Vashem, nos maravillaremos de la fe y la resistencia de su pueblo, que se levantó de las cenizas para resucitar y reconstruir el Estado Judío».
«Setenta años atrás, Estados Unidos fue el primero en reconocer a Israel, pero desde entonces, una administración tras otra se negó a reconocer su capital. El mes pasado, el presidente estadounidense Donald Trump enmendó un error histórico cuando declaró a Jerusalén como la capital de Israel.
«El vínculo de Israel con Jerusalén se remonta a 3.000 años. Jerusalén es la capital de Israel y, como tal, Trump ordenó al Departamento de Estado que trasladara inmediatamente la embajada de Tel Aviv a Jerusalén. La embajada se abrirá antes de fin del próximo año».
«Creeremos que la decisión del presidente es en interés de la paz. Al reconocer a Jerusalén, Trump eligió los hechos sobre la ficción. En una decisión sobre Jerusalén, Trump llamó a todas las partes a mantener el statu quo y dejó en claro que no estamos tomando posición sobre el estatus final. Si ambas partes están de acuerdo, Estados Unidos apoyará una solución de dos estados».
«La paz solo puede venir a través del diálogo».