El primer ministro Naftali Bennett se reunió el domingo con los jefes de los partidos de la coalición para preparar la próxima sesión de verano de la Knesset, ya que el gobierno sigue al borde del colapso, tras perder su mayoría parlamentaria.
Durante la reunión, los jefes de los partidos acordaron “trabajar juntos para mantener el gobierno y la coalición por el bien de los ciudadanos de Israel”, según un comunicado.
También discutieron una serie de proyectos de ley previstos para el próximo escaño de la Knesset, incluidas las medidas para reducir el coste de la vida, el presupuesto del Estado y los esfuerzos para seguir luchando contra la delincuencia en las comunidades árabes.
En la reunión estuvo ausente el partido islamista Ra’am, que congeló su participación en la coalición durante los disturbios del mes pasado en el Monte del Templo de Jerusalén.
Aunque el jefe del partido, Mansour Abbas, estaba en el extranjero y no asistió a la reunión, escribió en Facebook el sábado que su partido determinaría su posición sobre el Monte basándose en las posturas del rey jordano Abdullah II, de quien dijo que era el legítimo custodio del lugar sagrado.
El Monte del Templo, conocido por los musulmanes como Haram al-Sharif o complejo de Al-Aqsa, es el lugar históricamente más sagrado del judaísmo, y el tercero del Islam, con base en una leyenda. Las tensiones en el lugar han repercutido en atentados terroristas, presiones de los aliados de Israel, amenazas de Hamás y el agravamiento de la actual crisis de la coalición.
La coalición cuenta actualmente con solo 60 escaños en el parlamento, exactamente la mitad del total de 120 de la Knesset. Si Ra’am retira sus cuatro escaños, el gobierno se encontrará en minoría.
En una entrevista publicada el viernes, Abbas dijo que su partido no hará caer el gobierno y que estaba trabajando con Jordania para resolver las tensiones en el Monte del Templo.
También durante la reunión del domingo, los líderes del partido acordaron que el miembro de Yesh Atid, Boaz Toporovsky, actuara como jefe interino de la coalición, después de que el anterior titular de esa función, la legisladora de Yamina Idit Silman, desertara hacia la oposición.
La coalición se ha encontrado con un soporte vital después de que Silman privara al gobierno de su estrecha mayoría en la Knesset.
A pesar de la falta de mayoría del gobierno, no hay una constelación clara de legisladores que pueda sustituir a la coalición, que podría cojear hasta que se convoquen nuevas elecciones.
Bennett abordó la estabilidad de la coalición en la reunión, advirtiendo de las consecuencias de la disolución del gobierno.
“El gobierno debe seguir funcionando para que las empresas afectadas por la ola de Omicron sean compensadas, para que las festividades de Lag BaOmer de este año en el monte Meron se celebren de forma segura y no terminen de nuevo en una tragedia evitable”, dijo el primer ministro.