Un enviado israelí se disculpa ante el exrehén asesinado Sudthisak Rinthalak por no haberlo protegido y por el tiempo transcurrido hasta traer su cuerpo de regreso desde Gaza.
El enviado israelí para los rehenes, Gal Hirsch, expresa su pesar a Rinthalak y a su familia en una ceremonia conmemorativa de Estado en el monumento de la 8.ª Brigada Blindada, en el Aeropuerto Ben Gurión, antes de la repatriación del cuerpo a su natal Tailandia.
Rinthalak fue uno de los 39 tailandeses asesinados en el ataque terrorista de Hamás del 7 de octubre de 2023, mientras trabajaba cerca de los huertos de aguacate del kibutz Beeri. Unas 1.200 personas murieron en la masacre y 251 fueron tomadas como rehenes.
Su cuerpo fue devuelto a Israel el 3 de diciembre de este año.
“Esto no debería terminar así”, dice Hirsch. “No supimos protegerte. Tardamos demasiado en traerte de vuelta a casa”.
Rinthalak era “uno de nosotros”, añade Hirsch. “Ahora regresas a casa. Nunca, nunca te olvidaremos”.
Hirsch afirma que Israel hizo todo lo posible para traer de regreso a todos los rehenes y que hará todo lo necesario para repatriar el cuerpo del último rehén que permanece cautivo, Ran Gvili.
“Somos responsables de todos los secuestrados en Israel el 7 de octubre”, afirma.
El embajador de Tailandia en Israel, Boonyarit Vichienpuntu, señala que, como muchos trabajadores tailandeses, Rinthalak cruzó el océano con la determinación de ofrecer una vida mejor a sus seres queridos.
Añade que el gobierno tailandés reza por el regreso del último rehén israelí y por el fin de este período de duelo, a fin de implementar plenamente el acuerdo de alto el fuego entre Hamás e Israel.
