El presidente del Partido Democrático, Yair Golan, afirmó que la normalización con Arabia Saudita representa un “interés de seguridad israelí de primer orden”. Con esta declaración criticó los polémicos comentarios del ministro de Finanzas, Bezalel Smotrich, que la semana pasada generaron una amplia indignación pública.
El jueves, Smotrich manifestó que no aceptaría un acuerdo de normalización con Arabia Saudita si este implicaba la creación de un Estado palestino, y añadió con tono despectivo que los saudíes podían “seguir montando camellos”.
Riad ha sostenido durante años que solo establecerá relaciones normales con Israel si Jerusalén acepta un proceso irreversible y con plazos definidos hacia la creación de un Estado palestino. Esta exigencia es rechazada con firmeza por Smotrich y otros integrantes del gobierno derechista del primer ministro Benjamín Netanyahu.
En declaraciones a la prensa previas a una reunión de facciones, Golan señaló que Israel se beneficiaría diplomática, militar y económicamente de un acuerdo con Arabia Saudita. Sin embargo, añadió que “Smotrich prefiere fortalecer una organización terrorista en Gaza que amenaza a Israel antes que permitir un Estado palestino desmilitarizado y bajo supervisión”.
Por su parte, Netanyahu tolera esa postura porque el gobierno de Hamás en Gaza constituye su “póliza de seguro político”. Según Golan, la existencia de Hamás mantiene a los socios extremistas de Netanyahu dentro del gobierno y garantiza su permanencia en el poder.
