Isaac Herzog ha organizado en los últimos meses encuentros reservados en la Residencia Presidencial de Jerusalén. Su propósito ha sido alcanzar un consenso para crear un marco que permita establecer una comisión estatal de investigación sobre los fallos ocurridos durante la masacre dirigida por Hamás el 7 de octubre de 2023, según informó el Canal 12 sin revelar sus fuentes.
En esas reuniones participaron representantes del Consejo de Octubre, integrado por familias que perdieron a sus seres queridos en el ataque y reclaman una investigación estatal, junto con miembros del Foro Gvura, que agrupa a familias de soldados muertos en la guerra posterior contra Hamás en Gaza. Ambos colectivos han mantenido posturas firmes respecto a la exigencia de esclarecer responsabilidades.
Los cuatro asistentes identificados —Yehoshua Shani y Menachem Klemenson por el Foro Gvura, y Eyal Eshel y Reut Hecht-Edri por el Consejo de Octubre— habrían firmado acuerdos de confidencialidad que les impedían revelar la existencia o el contenido de las reuniones. Dichos encuentros se celebran cada dos semanas aproximadamente, incluso en fechas recientes, según el mismo medio.
Consultada por el Canal 12, la oficina del presidente respondió: “La Residencia Presidencial sirve fundamentalmente como un espacio de reunión, diálogo abierto y conversación para todos los ciudadanos de Israel. Diversos foros y grupos diversos se reúnen aquí en diferentes marcos regularmente con el propósito de dialogar — incluso cuando el objetivo no es alcanzar acuerdos, sino simplemente escuchar, conversar y afrontar los complejos problemas que están desgarrando la sociedad israelí. Las reuniones en la Residencia Presidencial se celebran en diversos formatos, para permitir este diálogo también entre familias en duelo que han perdido lo que más les es valioso”.
El informe añadió que esta gestión se originó tras un intento previo de Herzog, en mayo, de promover una comisión estatal de investigación cuya designación habría correspondido al presidente del Tribunal Supremo, Isaac Amit, en coordinación con el vicepresidente Noam Sohlberg. Ese plan fue bloqueado por el primer ministro Benjamin Netanyahu y posteriormente archivado, lo que incrementó la frustración de las familias de las víctimas y reavivó la actual iniciativa.
Aún no se ha aclarado por qué se mantuvo la confidencialidad del proceso, si las autoridades políticas estaban al tanto de él o qué consecuencias podría tener un eventual acuerdo sobre el gobierno, indicó el reporte. Netanyahu, por su parte, ha rechazado de forma reiterada la creación de una comisión estatal de investigación por los fallos del 7 de octubre. Su coalición busca impulsar una pesquisa propia, sosteniendo que gran parte de la ciudadanía no aceptaría los resultados de una comisión estatal, pese a que las encuestas reflejan que esta opción sigue siendo la preferida por el público.
