El presidente de Israel, Isaac Herzog, ha subrayado que su país no está interesado en iniciar una guerra con Hezbolá, sino que está comprometido en proteger a sus ciudadanos de los ataques perpetrados por el grupo terrorista, que tiene su base en el Líbano.
“Lo repito una y otra vez: Israel no busca la guerra, pero tenemos el derecho y el deber de defender a nuestro pueblo”, declaró Herzog.
El presidente también denunció que Hezbolá almacena y lanza misiles desde zonas residenciales y hogares civiles en el Líbano.
“Miles de cohetes de largo alcance se guardan en casas, salas de estar, dormitorios y cocinas, y luego se lanzan con la única intención de matar a nuestra gente”, afirmó Herzog, planteando la pregunta: “¿Aceptarían que esto ocurriera en sus hogares o en los de sus vecinos? ¿Qué nación permitiría que sus ciudadanos vivieran bajo una amenaza semejante por parte de sus vecinos?”