El ministro de Defensa israelí, Yoav Gallant, afirmó a través de Twitter en inglés que el ataque del martes por la noche que se saldó con la muerte de Fuad Shukr, un alto comandante de Hezbolá, demuestra que Israel vengará los ataques contra su población.
Gallant declaró: “Fuad Shukr ‘Sayyid’ Muhsan tiene las manos manchadas con la sangre de muchos israelíes. Esta noche hemos demostrado que la sangre de nuestro pueblo tiene un precio y que no hay lugar fuera del alcance de nuestras fuerzas para lograr este objetivo”.
Anteriormente, también en inglés, Gallant había señalado en Twitter que “Hezbolá cruzó la línea roja”. Paralelamente, las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) han lanzado una amplia campaña en Internet, tanto en inglés como en hebreo, para divulgar información sobre las acciones de Shukr, sobre quien se conoce relativamente poco en el ámbito público.
Según una fuente cercana a Hezbolá, que prefirió mantener el anonimato, Shukr estaba a cargo de las operaciones militares en el sur del Líbano. Esta fuente indicó que Shukr asumió el liderazgo tras la muerte de Imad Mughniyeh, el principal comandante de Hezbolá, quien murió en un atentado con coche bomba en Damasco en 2008. Este atentado fue atribuido a Israel por el grupo respaldado por Irán, aunque el gobierno israelí nunca lo reconoció oficialmente.