Israel presentó el miércoles un anuncio a la Corte Penal Internacional (CPI), expresando su intención de apelar la decisión del tribunal de emitir órdenes de arresto contra el primer ministro Benjamin Netanyahu y el ex ministro de Defensa, Yoav Gallant.
El país también solicitó que se retrase la ejecución de estas órdenes hasta que se resuelva la apelación presentada ante la corte.
Paralelamente, Netanyahu se reunió con el senador estadounidense Lindsey Graham (R-SC), quien le informó sobre las acciones que está llevando a cabo en el Congreso de EE. UU. en contra de la CPI y de los países que han cooperado con ella.
En su conversación, Netanyahu afirmó que “el Estado de Israel rechaza la autoridad de la Corte Penal Internacional en La Haya y la legitimidad de las órdenes de arresto emitidas contra el primer ministro y el ex ministro de Defensa”.
La Oficina del primer ministro expresó en un comunicado que “el anuncio de la apelación evidencia lo infundado y carente de base que fue la decisión de la CPI. Si el tribunal rechaza la apelación, quedará claro para los aliados de Israel en Estados Unidos y en todo el mundo cuán parcial es la Corte contra Israel”.