Gal Hirsch, responsable gubernamental encargado de los rehenes, expresó la indignación de Israel por la condición en que fueron liberados los tres rehenes. En un comunicado, Hirsch indicó que se han presentado objeciones a los mediadores y que se tomarán las medidas adecuadas. “Se ha enviado un mensaje a los mediadores y actuaremos como corresponda”, afirmó.
Sin revelar detalles sobre posibles acciones, altos funcionarios israelíes señalaron que el gobierno evalúa alternativas. Según el Canal 12, una de las opciones sería reducir la ayuda humanitaria destinada a Gaza.
El ministro de Asuntos Exteriores, Gideon Sa’ar, criticó la aparente contradicción entre las denuncias de escasez alimentaria en Gaza y el estado de los cautivos. Las imágenes de los rehenes, en condiciones físicas deplorables, refuerzan esta postura. “Durante más de un año, la comunidad internacional ha creído la propaganda sobre una presunta ‘hambruna’ en Gaza”, manifestó Sa’ar en la plataforma X.
Según el ministro, los habitantes de Gaza y los miembros de Hamás no muestran signos de desnutrición, a diferencia de los rehenes, quienes presentan una apariencia similar a la de “supervivientes del Holocausto”. Sa’ar afirmó que Hamás ha cometido crímenes de lesa humanidad al maltratar a los cautivos. “Es necesario erradicar el mal de Hamás, igual que se hizo con los nazis”, concluyó.