Jerusalén presiona a Hamás para reanudar la entrega de restos bajo el alto el fuego; una delegación estadounidense visitó la región y urgió recuperar cuerpos.
Presión de Israel y visita de EE. UU. en el alto el fuego vigente
Israel informó el domingo que no conoce el paradero de cuatro de los 13 cuerpos restantes de rehenes en Gaza, en medio de presión creciente sobre Hamás para reanudar la entrega de restos según el alto el fuego y el acuerdo de rehenes. Jerusalén insistió ante Washington en la máxima importancia de recuperar los cuerpos que continúan en la Franja, indicó la emisora pública Kan, tras varios días sin nuevas entregas por parte de Hamás.
Una delegación de altos funcionarios estadounidenses, con el vicepresidente JD Vance, visitó la región para apuntalar el frágil alto el fuego entre Israel y Hamás. Durante la visita, según Kan, el jefe del Estado Mayor de las FDI, teniente general Eyal Zamir, subrayó la relevancia de la devolución de cuerpos y recordó que Israel lleva más de una década en la búsqueda de Hadar Goldin, soldado caído en 2014 cuyo cuerpo integra el grupo de 13 no recuperados.
Hamás sostuvo que no logró ubicar algunos restos y que no pudo entregar ningún cuerpo desde el martes, porque requiere ayuda para localizarlos y recuperarlos. Israel afirmó con certeza que la organización puede entregar más cuerpos y que se niega a hacerlo, además de retener información sobre su paradero, en violación directa del acuerdo de alto el fuego de rehenes del 9 de octubre; el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, formuló la misma acusación.
Para acelerar el proceso, equipos de la Cruz Roja y de Egipto iniciaron el domingo operativos de búsqueda con la aprobación del primer ministro Benjamin Netanyahu. En paralelo, un funcionario israelí no identificado informó que el primer ministro autorizó a representantes de Hamás a ingresar en zonas de Gaza controladas por las FDI para buscar cuerpos. Al-Araby difundió imágenes de miembros de Hamás junto a un vehículo de la Cruz Roja en al-Mawasi, cerca de Rafah.
Datos clave del estatus de rehenes y restos
- Israel reportó desconocer la ubicación de cuatro de los 13 cuerpos restantes.
- Hamás no entregó cuerpos adicionales desde el martes y pidió ayuda para localizarlos.
- La visita de JD Vance buscó apuntalar el alto el fuego entre Israel y Hamás.
- El acuerdo de alto el fuego de rehenes se firmó el 9 de octubre.
Cifras de rehenes y tensiones sobre desarme y fases del acuerdo
Antes del alto el fuego, Hamás retenía los cuerpos de 28 rehenes muertos. Desde entonces, devolvió 15 de ellos y liberó a 20 rehenes sobrevivientes, del total de 251 secuestrados durante la masacre del 7 de octubre de 2023 en Israel que precipitó la guerra en Gaza. La demora en la recuperación de los rehenes muertos no constituyó el único factor de riesgo para el entendimiento, según las posiciones expuestas por las partes.
Un alto dirigente de Hamás afirmó el domingo que el grupo no se desarmará mientras la “ocupación” israelí no sea cosa del pasado. Conforme a los términos del acuerdo negociado por Estados Unidos con Israel, la segunda fase de implementación prevé el desarme de Hamás y su retiro de toda función de gobierno en Gaza. Israel fijó el desarme de Hamás como prioridad y lo consideró uno de los objetivos principales para poner fin a la guerra.
El principal negociador de Hamás, Khalil al-Hayya, declaró que las armas del grupo están “vinculadas a la presencia de la ocupación y la agresión” y añadió: “Si la ocupación termina, estas armas serán transferidas al Estado”. No quedó claro a qué Estado se refirió ni si aludió al organismo administrativo palestino aún no constituido que sustituiría a Hamás en el gobierno de Gaza.
Tampoco resultó preciso qué entiende por “ocupación”, es decir, si se refiere a presencia israelí en Gaza y en Judea y Samaria o al Estado de Israel en su conjunto. El texto señaló que palestinos y algunas naciones árabes emplean esa designación con frecuencia, aunque sin fijar un alcance operativo inequívoco para los compromisos incluidos en la fase posterior del acuerdo.
Plan de Trump y fuerza internacional para la seguridad futura en Gaza
El plan de 20 puntos de Trump para Gaza exige el compromiso de desarme de Hamás, pero el acuerdo firmado el 9 de octubre en Sharm el-Sheikh por Ron Dermer y mediadores no recogió esa exigencia. La diferencia entre la propuesta y el texto firmado alimentó incertidumbre sobre la siguiente fase del proceso, su secuencia y los incentivos que impulsarían a las partes a cumplir los compromisos previstos.
Fuentes de defensa informaron a legisladores israelíes que la Fuerza Internacional de Estabilización, llamada a asumir la seguridad de la Franja una vez se retiren las FDI, probablemente incluirá tropas de Pakistán. Según Ynet, a miembros del Comité de Asuntos Exteriores y Defensa de la Knéset se les comunicó en una sesión a puerta cerrada la composición tentativa y los países en evaluación para integrar el despliegue.
Las mismas fuentes detallaron que la Fuerza estaría compuesta por soldados de Indonesia, Azerbaiyán y Pakistán. Indonesia se ofreció de manera pública a enviar efectivos y, según esas fuentes, Azerbaiyán también accedió a contribuir, mientras que la eventual participación paquistaní no se encontraba difundida de forma pública hasta ese momento. Los preparativos descritos se vincularon a la retirada paulatina de las FDI prevista en el esquema de estabilización.
Trump advirtió el sábado que Hamás sería responsable si el alto el fuego colapsaba y anunció que observaría muy de cerca sus acciones durante las siguientes 48 horas para verificar la reanudación de la entrega de cuerpos. La intensificación de esfuerzos y contactos posteriores respondió a esa advertencia y a la prioridad que Israel asignó a la localización y devolución de los restos aún pendientes.
