En una entrevista con Bloomberg Television, el ministro de Asuntos Estratégicos de Israel, Ron Dermer, afirmó que Israel no se retirará del Corredor Filadelfia en la primera fase de un posible acuerdo con Hamás, aunque dejó abierta la opción de una retirada completa en una segunda fase, sujeta a negociación.
“En la primera fase, Israel mantendrá su presencia en esa zona hasta que tengamos una solución práctica que pueda convencer al pueblo israelí de que lo ocurrido el 7 de octubre no volverá a suceder”, señaló Dermer. Afirmó que el objetivo es garantizar que “Hamás no vuelva a rearmarse”.
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, defendió recientemente la necesidad de una presencia militar permanente en la frontera entre Gaza y Egipto. Sin embargo, Dermer, uno de sus asesores más cercanos, sugirió que en el marco de un alto el fuego a largo plazo podrían considerarse acuerdos alternativos.
“La primera fase del acuerdo implica negociar las condiciones de un alto el fuego duradero”, explicó Dermer. “Solo una vez que estas negociaciones hayan concluido y se mantenga el alto el fuego en la primera fase, se podrá avanzar hacia la segunda fase, donde se discutirían los acuerdos de seguridad a largo plazo en el Corredor Filadelfia”.
Durante la entrevista, a Dermer se le preguntó repetidamente sobre un informe del Times of Israel que afirmaba que Netanyahu había enviado al jefe del Mossad, David Barnea, a Doha para informar al primer ministro de Catar, Mohammed bin Abdulrahman Al-Thani, de que las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) están preparadas para retirarse completamente del Corredor en la segunda fase del acuerdo.
Esto ocurrió horas antes de la conferencia de Netanyahu en la que sostuvo que las FDI permanecerían indefinidamente en esa zona.
Dermer describió el informe como “engañoso”, pero evitó proporcionar detalles adicionales. “No puedo hablar sobre los preparativos para una segunda fase porque aún no hemos negociado quiénes estarían allí ni cuánto tiempo llevaría”, afirmó.
No obstante, Dermer fue claro al decir que “las fuerzas israelíes no pueden retirarse hasta que exista una solución efectiva y tangible sobre el terreno para el Corredor Filadelfia”.
Por otro lado, subrayó que Israel no hará concesiones tras el asesinato de seis rehenes por parte de Hamás la semana pasada. “Si Hamás no paga un alto precio por matar a estos seis rehenes, creerán que matar rehenes les brindará concesiones”, declaró Dermer, en referencia a una posible presión interna para cambiar la postura de Israel sobre el Corredor Filadelfia tras los asesinatos.
Además, Dermer criticó duramente a Egipto por no haber evitado el contrabando de armas desde el Sinaí hacia Hamás. A diferencia de Netanyahu, quien también ha criticado esta situación, Dermer mencionó específicamente al presidente egipcio, Abdul Fatah el-Sisi, aclarando que no está “cuestionando las intenciones de los egipcios”, sino “los resultados” de sus acciones.
El ministro también dirigió críticas a Catar, señalando que este país ha dado refugio y financiamiento a Hamás durante mucho tiempo, además de respaldar a los Hermanos Musulmanes a nivel mundial y de difundir propaganda antisemita y antiamericana a través de su canal Al-Jazeera, controlado por el Estado.
Pese a las críticas recientes del presidente estadounidense Joe Biden, Dermer aseguró que Israel y Estados Unidos están trabajando de manera estrecha en las negociaciones sobre los rehenes. “Estamos tratando de llegar a un acuerdo con los estadounidenses tanto como sea posible. Creo que hemos estado alineados en esto en los últimos meses”, afirmó.
Finalmente, señaló que cuando ni Estados Unidos ni Israel muestran señales de ceder en su postura y la presión recae directamente sobre Hamás, las probabilidades de alcanzar un acuerdo aumentan considerablemente.