El Ministerio de Asuntos Exteriores emite un comunicado en el que tacha las afirmaciones de la Autoridad Palestina durante un juicio en La Haya sobre la presencia israelí en Judea y Samaria de “creación de una realidad fundamentalmente distorsionada” y tacha la vista de “circo mediático” sin valor.
La AP está “lanzando acusaciones falsas” en el juicio, dice el ministerio, e “intentando convertir un conflicto que debería resolverse mediante negociaciones directas y sin imposiciones externas en un proceso legal unilateral e improcedente diseñado para adoptar una narrativa extremista y distorsionada”.
El ministerio afirma que la masacre del 7 de octubre del año pasado “escandalosamente” no se mencionó en absoluto en la audiencia, y añade que quienes piden a las FDI que se retiren completamente de todas las zonas de Judea y Samaria “sin condiciones y sin negociaciones están pidiendo de hecho otra masacre de ciudadanos israelíes”.
Los dirigentes de la AP llevan años “rechazando las negociaciones directas para resolver el conflicto”, dice la declaración del ministerio, “al tiempo que fomentan la incitación al terrorismo, promueven el antisemitismo y ofrecen incentivos financieros a los terroristas que asesinan a judíos”, y añade que estas cuestiones “se ocultaron al Tribunal” durante el interrogatorio.