Israel ha comunicado que no permitirá que la Autoridad Palestina desempeñe un papel en la gestión del cruce de Rafah, situado en el sur de Gaza, según informa Axios, citando a cuatro funcionarios estadounidenses e israelíes familiarizados con el asunto.
El cruce en la frontera entre Gaza y Egipto ha permanecido cerrado después de que las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) tomaran el control del lado palestino el mes pasado. Egipto ha manifestado que se negará a reabrirlo hasta que vuelva a estar bajo control palestino, para evitar ser visto como cómplice de la operación militar israelí en la ciudad más meridional de Gaza.
Tras la presión de Estados Unidos, ambas partes acordaron en principio reabrir el cruce para la ayuda humanitaria la semana pasada, pero desde entonces no han logrado avances significativos hacia ese objetivo.
En declaraciones a Axios, dos fuentes israelíes anónimas revelaron que, antes de una reunión sobre el tema en El Cairo el pasado domingo, el primer ministro Benjamin Netanyahu informó al gabinete de seguridad que no estaba dispuesto a permitir que la Autoridad Palestina gestionara el cruce en ninguna capacidad.
Según el informe, sus comentarios contradicen una política aprobada en el gabinete de guerra días antes, en la que se acordó que cualquier entidad palestina gobernante, excepto Hamás, podría supervisar las operaciones diarias del cruce fronterizo.