Durante la reunión del Gabinete celebrada el domingo, Yariv Levin, ministro de Justicia, manifestó su respaldo a la reanudación de la reforma judicial, la cual fue suspendida tras el estallido de la guerra en Gaza el 7 de octubre.
Levin destacó la importancia de alcanzar consensos con la oposición en torno a este tema durante la sesión del Gobierno.
En el transcurso del gabinete, varios ministros propusieron someter a votación la ley que modifica la comisión de selección de jueces, aprobada por la comisión el año pasado para su segunda y tercera lectura.
En el debate, Levin subrayó que el punto de partida es una modificación del Tribunal Supremo y que, si esta vez todos los miembros de la coalición están “alineados”, como contrastó con la experiencia del año anterior, será posible avanzar en el proceso y llegar a un acuerdo con la oposición.
Itamar Ben Gvir, ministro de Seguridad Nacional, expresó su descontento con la oposición de la Fiscal del Estado al nombramiento de la Comisaria de la Función Pública, diciendo: “Ella también pretende controlar este nombramiento. Quiere gobernarnos. Es momento de despedirla”.
El adjunto al Procurador del Estado, Gil Limón, sostuvo: “Nuestra interpretación es que la manera adecuada es designar al comisionado a través de un comité de búsqueda”.
Levin, molesto, respondió a Limón: “¡Existe una ley! ¿Estás por encima de ella? No se necesita interpretación, la ley es clara”.
Por su parte, el primer ministro Benjamín Netanyahu expresó: “No entienden lo que es la democracia. No hay problema en comprobar la pureza del carácter. El público elige a los funcionarios para que implementen políticas y realicen nombramientos de alto nivel”.
El líder de la oposición, Yair Lapid, criticó la postura de Levin y las acciones del gobierno, declarando que los llamamientos de Levin para retomar la reforma judicial y los intentos de destituir al Fiscal del Estado demuestran una desconexión total con la ciudadanía de Israel. “La última vez, la reforma debilitó a la sociedad israelí, y luego llegó el 7 de octubre”, añadió Lapid.
Lapid también reprochó que, en lugar de atender las necesidades del norte y del sur del país, así como de los rehenes en Gaza, el gobierno se enfoca en socavar el estado de derecho. Aseguró que no permitirán que el gobierno más extremista de la historia de Israel continúe promoviendo esta reforma y que usarán todas las herramientas a su disposición para detenerlo.
Amit Bechar, presidente del Colegio de Abogados de Israel, lamentó las declaraciones de Levin en la reunión del gabinete, señalando que no son nuevas y que siguen impulsando una reforma que ha provocado la división interna más grave en la historia de Israel.
Bechar instó a Levin a cumplir su compromiso de alcanzar “amplios acuerdos”, como se afirmó en la audiencia del Tribunal Supremo, en la petición que exige convocar al comité para seleccionar jueces y nombrar un presidente del Tribunal Supremo.