Se ha informado que el negociador principal de Israel en las conversaciones sobre un cese del fuego y un acuerdo de rehenes con Hamás en Gaza, ha indicado a las familias de los cautivos que la probabilidad de un acuerdo en el corto plazo es muy baja. Aumentan los temores sobre el destino de los rehenes.
El director del Mossad, David Barnea, quien lidera el equipo israelí en las negociaciones indirectas, señaló que Israel está adoptando una postura de espera frente a Hamás. Hasta ahora, este grupo no ha respondido a las propuestas de alto el fuego que han sido enviadas por mediadores internacionales.
El canal de noticias 12 reportó que, sin citar fuentes, Barnea comentó que Hamás continúa exigiendo el fin de la guerra como condición para la liberación de los rehenes. Este contexto complica aún más las negociaciones y mantiene la incertidumbre en torno al futuro de los cautivos.
En las últimas semanas, Barnea ha mantenido varias reuniones con las familias de los rehenes para proporcionar actualizaciones sobre el estado de las negociaciones. El 27 de octubre, Barnea voló a Qatar para reunirse con Bill Burns, director de la CIA, y el primer ministro qatarí, Mohammed bin Abdulrahman Al Thani.
El objetivo de esta reunión era impulsar un acuerdo de liberación de rehenes; sin embargo, no se ha informado sobre avances significativos tras las conversaciones. Un funcionario israelí mencionó que Jerusalén está considerando un acuerdo limitado que podría abrir la puerta a negociaciones más amplias.
Este enfoque busca arrojar luz sobre la toma de decisiones de Hamás tras la muerte de su líder, Yahya Sinwar, quien fue asesinado el mes pasado por las fuerzas de defensa israelíes. Este evento ha sido calificado por los líderes israelíes y occidentales como una “oportunidad” para avanzar en un acuerdo que posibilite la liberación de los rehenes.
Expectativas sobre la respuesta de Hamás ante las propuestas israelíes
A pesar de que Israel aún no ha recibido una respuesta oficial de Hamás a las últimas propuestas, los funcionarios israelíes consideran poco probable que el grupo acceda a renunciar a su demanda de un alto el fuego total y la retirada de las tropas. La situación sigue siendo delicada y cargada de incertidumbre.
Una fuente anónima del ámbito de defensa, citada por el canal, afirmó: “Ha llegado el momento de mirar la realidad a los ojos”. Esta declaración refleja la necesidad de replantear la estrategia para abordar la situación actual y el regreso de los rehenes.
La misma fuente añadió que, para lograr el objetivo de recuperar a los rehenes, es imperativo que Israel cierre las puertas en Gaza y formule una posición que garantice sus intereses de seguridad a largo plazo. La presión continúa creciendo mientras las negociaciones siguen estancadas.
La semana pasada en Doha, capital de Qatar, se llevaron a cabo conversaciones en las que Egipto presentó una propuesta de tregua de dos días, condicionada a la liberación de cuatro rehenes. La intención es ampliar este acuerdo. También se contempla una iniciativa qatarí-estadounidense que podría facilitar la liberación de todos los rehenes y poner fin a la guerra.
Aunque Egipto no participó directamente en las conversaciones, se informa que Barnea sostuvo reuniones con su homólogo egipcio el mes pasado. Las discusiones sobre los rehenes han estado estancadas durante más de dos meses, con Estados Unidos responsabilizando a Hamás por su falta de participación.
Los mediadores egipcios y qataríes han expresado en privado que la responsabilidad recae en Israel. El viernes, Hamás reforzó sus demandas históricas de un alto el fuego permanente y la retirada total de las fuerzas israelíes de Gaza. Según ellos, Israel solo ha ofrecido una pausa temporal en la guerra.
Posición de Israel ante las negociaciones y exigencias de Hamás
El primer ministro Benjamin Netanyahu, en respuesta, afirmó que Israel continuará luchando hasta alcanzar sus objetivos de guerra, que incluyen la destrucción de Hamás y la recuperación de los rehenes. Netanyahu insistió en que cualquier acuerdo debe incluir una exención para mantener tropas en un corredor clave en la frontera de Gaza con Egipto.
“Las propuestas no satisfacen las necesidades generales del pueblo palestino en términos de seguridad, estabilidad, socorro y reconstrucción”, manifestó Bassem Naem, un alto líder terrorista de Hamás, a través del canal Al Aqsa TV, antes de que la posición del grupo se confirmara con The Associated Press.
Durante una manifestación en Tel Aviv, familias de algunos rehenes expresaron que los negociadores deberían centrarse en un acuerdo global que acabe con la guerra y libere a todos los rehenes de manera simultánea. Ronen Neutra, padre de Omer Neutra, un rehén israelí-estadounidense, argumentó que no hay tiempo para un acuerdo en varias fases.
Noam Idan Ben Ezra, hermano de Tsahi Idan, también presente en la manifestación, afirmó que un acuerdo para liberar a los rehenes “requiere el fin de la guerra… El ejército ya ganó. Ahora es el turno de la cúpula política”. Estas afirmaciones resaltan la urgencia de un acuerdo definitivo.
Antes de la muerte de Sinwar, las negociaciones indirectas entre Israel y Hamás giraban en torno a varios temas, incluyendo el estatus de un alto el fuego, la identidad de los rehenes israelíes y los terroristas palestinos presos, así como el control de la frontera entre Gaza y Egipto. La situación es compleja y sigue evolucionando.
Estado actual de los rehenes y compromiso del gobierno israelí
Se estima que 97 de los 251 rehenes capturados por Hamás el 7 de octubre permanecen en Gaza. Esto incluye los cuerpos de al menos 34 personas, cuya muerte ha sido confirmada por el ejército israelí. Además, Hamás retiene a dos civiles israelíes y los restos de dos soldados israelíes que murieron en 2014.
En una ceremonia estatal la semana pasada, Netanyahu y otros funcionarios de alto rango reafirmaron su compromiso de hacer todo lo posible para traer de vuelta a los rehenes. El primer ministro describió la tarea de recuperar a los rehenes, tanto vivos como muertos, como una “misión sagrada”.