El primer ministro Benjamin Netanyahu afirmó ante las tropas que la permanencia de Israel en Siria tiene una “inmensa importancia”. Lo dijo durante una visita a un puesto avanzado de las FDI en la zona de amortiguamiento, donde destacó el papel estratégico del despliegue militar israelí en ese territorio.
El recorrido incluyó a altos funcionarios de seguridad y diplomacia, y se produjo en un momento en que las conversaciones entre Jerusalén y Damasco sobre un posible acuerdo de seguridad para el sur de Siria permanecen paralizadas. Un alto funcionario israelí señaló que tal entendimiento “no está en los planes ahora mismo”.
Israel mantiene su decisión de seguir instalado en los nueve puestos tomados tras la caída del régimen de Bashar al-Assad en diciembre de 2024, salvo que el nuevo gobierno acepte un pacto de paz completo y establezca la normalización de relaciones con Jerusalén, según informaron fuentes oficiales.
“Damos una enorme importancia a nuestra capacidad aquí, tanto defensiva como ofensiva”, declaró Netanyahu durante la visita. Afirmó que el objetivo es “proteger a nuestros aliados drusos, y especialmente salvaguardar el Estado de Israel y su frontera norte frente a los Altos del Golán”.
“Esta es una misión que puede desarrollarse en cualquier momento, pero contamos contigo”, expresó el primer ministro a los soldados desplegados en el área, reconociendo su compromiso con la seguridad nacional y la defensa de la frontera norte.
El gobierno sirio condenó la visita “en los términos más enérgicos”, calificándola de “ilegal” y considerando la presencia de las FDI en el sur del país como “una grave violación de la soberanía e integridad territorial de Siria”, según un comunicado emitido tras el recorrido de Netanyahu.
De acuerdo con la Oficina del primer ministro, el propósito del desplazamiento fue agradecer a las tropas por su despliegue en la zona recientemente ocupada. “Realmente agradecieron la visita”, señaló un funcionario del PMO. “Hay soldados allí en su sexta ronda. Dijeron que quieren continuar y que quieren seguir asegurando todas las fronteras”.
“Al inicio de la visita, el primer ministro llegó a un puesto de las FDI, donde realizó una observación del sector y posteriormente sostuvo una discusión de seguridad”, informó su oficina. Netanyahu “se reunió con soldados en activo y de reserva, elogió sus acciones durante la guerra y sus esfuerzos por mantener la seguridad en la zona, y respondió a sus preguntas”.
En la visita lo acompañaron el ministro de Defensa, Israel Katz; el ministro de Asuntos Exteriores, Gideon Sa’ar; el jefe del Estado Mayor de las FDI, teniente general Eyal Zamir; y el jefe del Shin Bet, David Zini, además de otras autoridades civiles y militares de alto rango.
También estuvieron presentes el jefe interino del Consejo de Seguridad Nacional, Gil Reich; el embajador israelí en EE. UU., Yehiel Leiter; el jefe del Mando Norte, general Rafi Milo; el coordinador de actividades gubernamentales en los territorios, general Ghassan Alian; y el comandante de la 210ª División, general Yair Peli.
Las FDI se encuentran desplegadas en nueve puestos dentro del sur de Siria desde la caída del régimen de Assad en diciembre de 2024, en zonas bajo supervisión de la ONU en la frontera. Dos de esas posiciones están ubicadas en el lado sirio del monte Hermón, cerca del límite con los Altos del Golán.
Las unidades israelíes operan hasta quince kilómetros dentro de Siria, con el propósito de interceptar armas que, según Israel, podrían representar una amenaza si son tomadas por “fuerzas hostiles”, entre ellas Hezbolá, grupo con fuerte presencia en el Líbano.
Un funcionario israelí confirmó que las negociaciones mediadas por Estados Unidos para lograr un acuerdo de seguridad entre Jerusalén y Damasco no han avanzado. “Aún no estamos cerca”, indicó. “Ahora mismo no está en los planes”, añadió sobre la posibilidad de firmar un pacto.
Un informe de Kan señaló que Israel se niega a abandonar sus posiciones en el sur de Siria sin un acuerdo de paz integral con Damasco, algo que no se está discutiendo actualmente en las conversaciones mediadas por Washington.
Después de su histórica visita a la Casa Blanca, el presidente sirio Ahmed al-Sharaa descartó unirse a los Acuerdos de Abraham, argumentando que las condiciones aún no son adecuadas y que Siria “no iba a entrar en una negociación directa ahora mismo”.
El mandatario sirio también criticó la presencia israelí en su territorio. “Israel ocupó los Altos del Golán para proteger a Israel, y ahora están imponiendo condiciones en el sur de Siria para proteger los Altos del Golán”, dijo Sharaa. “Así que después de unos años, quizá ocupen el centro de Siria para proteger el sur de Siria. Llegarán a Múnich por ese camino”.