El primer ministro Benjamin Netanyahu afirmó que su reciente encuentro con el presidente estadounidense Donald Trump logró “tremendos avances” que podrían garantizar la seguridad de Israel durante generaciones. Así lo expresó en la reunión de gabinete tras su regreso de Washington.
Netanyahu subrayó la magnitud de las oportunidades surgidas, asegurando que algunas de ellas eran inimaginables hasta hace pocos meses. Sin embargo, no dio detalles específicos sobre los acuerdos alcanzados. Trump, por su parte, había mencionado previamente su intención de poner a Gaza bajo control estadounidense, desplazando a sus 2,3 millones de habitantes y transformando la zona en la “Riviera del Medio Oriente”. Aunque inicialmente presentó esta medida como permanente, tanto funcionarios israelíes como estadounidenses recalcaron que el traslado sería voluntario y temporal.
El primer ministro señaló que Trump respaldó los objetivos de guerra de Israel, que incluyen la eliminación de Hamás, la liberación de todos los rehenes, la eliminación de amenazas desde Gaza, el retorno seguro de los residentes desplazados en el norte y sur de Israel, y la prevención del acceso de Irán a armas nucleares.
Netanyahu destacó también la “visión revolucionaria” de Trump respecto al futuro de Gaza, afirmando que esta estrategia podría abrir nuevas posibilidades para Israel.
Concluyó calificando la visita como un “punto de inflexión histórico” y reafirmando el compromiso de Israel con el alto el fuego en Gaza. Este anuncio se produce después de que las Fuerzas de Defensa de Israel dispararan contra palestinos que se acercaron a la frontera israelí.