Bajo la lluvia, tras descender de su avión en el aeropuerto John F. Kennedy de Nueva York, el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, aseguró que Israel “seguirá atacando a Hezbolá hasta que logremos todos nuestros objetivos”. El asesinato del comandante de la fuerza aérea de Hezbolá forma parte de esta política, añadió Netanyahu.
A su llegada, Netanyahu y su esposa Sara fueron recibidos en la pista por el embajador Michael Herzog, el embajador ante la ONU, Danny Danon, y el cónsul general de Nueva York, Ofir Akunis. La oficina del primer ministro confirmó que Netanyahu aprobó personalmente el ataque en Beirut desde el avión oficial de Israel, conocido como Wings of Zion.
Los funcionarios que acompañaban al primer ministro destacaron que la red de comunicaciones del avión funcionó perfectamente durante el vuelo.