El miércoles por la noche el primer ministro Benjamin Netanyahu envió una carta al presidente de la Knesset, el MK Benny Gantz, y al presidente Reuven Rivlin anunciando que había logrado formar un gobierno.
Netanyahu pretende, si los contactos con Yamina tienen éxito, mantener el Ministerio de Educación abierto para uno de los MK’s del partido. Sin embargo, la distancia entre las posiciones de los partidos Likud y Yamina siguen siendo grandes.
Anteriormente, el presidente de Yamina, el Ministro de Defensa Naftali Bennett, habló con el Primer Ministro Netanyahu en un intento de llegar a un compromiso que permita al partido unirse al gobierno de unidad.
Durante la conversación, el Primer Ministro dijo que la propuesta del Likud no ha cambiado ni cambiará y que la propuesta que está sobre la mesa es la Cartera de Jerusalén, un viceministro con responsabilidad en el servicio nacional y los poblados judíos, la presidencia parcial del comité de absorción y otro ministerio.
La conversación terminó sin un acuerdo.
Al final, el ministro Naftali Bennett escribió en Twitter, “La decisión es de Netanyahu. Como dije desde el principio, queremos entrar en el gobierno solo si tenemos influencia. El impacto se deriva enteramente de las áreas de responsabilidad. Si el primer ministro nos quiere en posiciones de influencia, nos encantaría entrar. Si el primer ministro nos quiere marginados, débiles e influyentes, preferiríamos ir a la oposición”.
Fuentes de Yamina dijeron: “La cartera de economía no se mencionó en la conversación, ni la cartera de educación. Netanyahu dijo ‘otra cartera’ sin especificar cuál. El significado: la oferta ha sido disminuida”.