la muerte de Hanna Katzir, residente del Kibbutz Nir Oz y retenida como rehén por Hamás durante dos meses, fue motivo de pesar para el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu. Katzir, quien perdió a su esposo e hijo a manos del grupo terrorista, regresó a Israel con profundas heridas emocionales.
En un comunicado oficial, Netanyahu expresó: “Logramos traer de vuelta a Hanna, quien fue brutalmente secuestrada por Hamás el 7 de octubre, pero las cicatrices del horror que vivió la acompañaron hasta su último día”. La oficina del primer ministro difundió estas palabras tras conocerse la noticia de su muerte.
Hanna fue una de las 105 personas liberadas por Hamás durante la tregua de una semana en noviembre de 2023. Desde entonces, los esfuerzos para alcanzar nuevos acuerdos que permitan liberar al resto de los rehenes se han estancado. Esta situación ha generado críticas hacia Netanyahu por la falta de avances en las negociaciones.
El mandatario aseguró: “Abrazamos a la familia Katzir y seguimos comprometidos a hacer todo lo posible hasta que todos los rehenes regresen a casa”. Estas palabras reflejan el compromiso declarado por el gobierno de Israel para resolver la crisis.
El comunicado incluyó también un mensaje de Sara Netanyahu, quien dejó Israel hace un mes y aún no ha regresado, según informaron fuentes locales.