El primer ministro Benjamin Netanyahu se reunirá con su equipo reducido de ministros y asesores para evaluar las gestiones orientadas a alcanzar un alto el fuego con Hamás y facilitar la liberación de rehenes. El encuentro abordará las posibles medidas ante la falta de avances en los contactos indirectos con la organización islamista.
Altos funcionarios israelíes informaron al Canal 13 que Israel transmitió a Hamás que, si no acepta en los próximos días la propuesta vigente para concretar un alto el fuego y liberar rehenes, comenzará a anexar territorio en los márgenes de Gaza. Esta advertencia representa una escalada en la presión hacia el grupo palestino.
Según el Canal 12, Israel entregó a Hamás, a través de mediadores regionales, un documento que define sus líneas rojas respecto al despliegue de las Fuerzas de Defensa de Israel y a la posible liberación de prisioneros. La comunicación contiene condiciones específicas que Tel Aviv no está dispuesto a modificar.
El texto señala que Israel no se retirará del corredor de Philadelphi ni de la franja de seguridad en la frontera con Gaza, no permitirá la reapertura del cruce de Rafah y no aceptará una liberación masiva de prisioneros que impida a Hamás entregar al grupo final de rehenes en el marco de una tregua.
El informe sostiene que Israel no prevé que Hamás adopte una postura más flexible. “Israel no será paciente por mucho más tiempo”, declaró un alto funcionario israelí citado por medios locales.
No obstante, el Canal 12 informó que la Casa Blanca no considera viable en este momento autorizar una acción israelí orientada a anexar sectores de la Franja de Gaza, lo cual representa un freno a cualquier decisión inmediata por parte del gobierno israelí.