Para lograr la paz con más vecinos y derrotar a sus enemigos, Israel debe mantener su unidad, afirmó el primer ministro Benjamin Netanyahu. En ese marco, hizo un llamado a todos, tanto a los miembros de la oposición como a los de la coalición, y a través de ellos al público.
Netanyahu instó a la calma y a la moderación en un momento de alta tensión: “Este es el momento de bajar las llamas”, declaró, después de criticar a la oposición por presionar para poner fin a la guerra en Gaza en los términos de Hamás. Señaló que, en una democracia, es posible tomar decisiones por mayoría o minoría, alcanzar compromisos y debatir desacuerdos de manera constructiva.
Sin embargo, destacó que estas discusiones deben centrarse en el asunto en cuestión y no recurrir a la violencia, incluyendo amenazas de asesinato contra funcionarios electos, el primer ministro y su familia, o los familiares de los ministros: “Hacer esto con un enfoque en el asunto en cuestión, ciertamente no con violencia, ciertamente no con amenazas de asesinato de funcionarios electos, ciertamente no con amenazas de asesinato contra el primer ministro y su familia, y también con las familias de los ministros”.
El primer ministro anunció que el gobierno aprobará próximamente el presupuesto de 2026 y aseguró: “Continuaremos fortaleciendo la economía de Israel”. Destacó el desempeño económico del país durante la guerra, que, según él, ha llamado la atención internacional: “La inflación está bajando, el shekel es fuerte, el desempleo está en su punto más bajo y la bolsa de valores está en su punto más alto”.