Cualquiera que intente dañar a Israel pagará un «alto precio», dijo el martes por la tarde el primer ministro Benjamin Netanyahu, en su primera declaración sobre la Operación Escudo del Norte para destruir los túneles terroristas de Hezbolá que penetran en Israel.
Netanyahu convocará una reunión del gabinete de seguridad por la noche para discutir las primeras etapas de la operación.
Dijo que ya ha habido «éxito» en las primeras etapas de la operación, pero no dio más detalles.
«Estamos trabajando de manera responsable y con determinación en todos los frentes en paralelo«, dijo Netanyahu, quien también asumió el cargo de ministro de defensa el mes pasado cuando Avigdor Lieberman renunció porque no estaba contento de que Netanyahu no aprobara medidas más agresivas contra Hamás en la Franja de Gaza.
«Continuaremos con otras acciones, abiertas y encubiertas, para garantizar la seguridad de Israel», dijo Netanyahu.
Netanyahu regresó a Israel el martes por la mañana temprano desde Bruselas, donde sostuvo una reunión no anunciada previamente con el Secretario de Estado de los Estados Unidos Mike Pompeo.
De acuerdo con la declaración de la Oficina del Primer Ministro, Netanyahu informó a Pompeo sobre la Operación “Escudo del Norte” y destacó que los túneles eran una violación flagrante de la Resolución de Seguridad de la ONU 1701 que pedía un «respeto total» de la Línea Azul, que es la frontera internacional reconocida entre Israel y Líbano.
Después de esa reunión, el Departamento de Estado dijo que Pompeo enfatizó el compromiso de Estados Unidos con la seguridad de Israel y el derecho absoluto a la legítima defensa y «reiteró la decisión de Estados Unidos de enfrentar la totalidad de las amenazas del régimen iraní a través de la máxima presión».