El primer ministro Benjamin Netanyahu ha sido objeto de críticas y protestas por parte de la comunidad drusa en relación con la construcción de un proyecto de turbinas eólicas en los Altos del Golán. Sin embargo, en un anuncio reciente, Netanyahu ha declarado una breve pausa en la construcción del aerogenerador, en respuesta a las preocupaciones planteadas por la comunidad.
Las protestas de la comunidad drusa se han intensificado en los últimos días, y el jeque Muafak Tarif, líder de la comunidad drusa israelí, advirtió al gobierno que detuviera las obras de las turbinas eólicas o enfrentaría una reacción sin precedentes. Tarif también pidió al primer ministro que buscara un acuerdo aceptable para los residentes drusos y anulara leyes discriminatorias.
En respuesta a estas demandas, Netanyahu se comunicó con Tarif y acordó detener temporalmente la construcción del aerogenerador hasta después de la festividad de Eid al-Adha. El primer ministro reconoció la importancia de encontrar soluciones para los problemas de vivienda de la comunidad drusa, especialmente para aquellos que han servido en el ejército.
La oficina de Netanyahu emitió una declaración en la que instaba a abordar las preocupaciones de la comunidad drusa y se comprometía a buscar soluciones justas. En particular, se mencionó la necesidad de igualdad y asociación, reconociendo la contribución excepcional de la comunidad drusa a la seguridad nacional a través de su servicio en las FDI.
El ministro de Seguridad Nacional, Itamar Ben Gvir, inicialmente adoptó una postura de línea dura ante las protestas drusas y afirmó que las obras del proyecto de parque eólico se detendrían durante las vacaciones de Eid al-Adha, pero luego se reanudarían. Sin embargo, después de reunirse con Tarif y un consejo comunitario druso, Ben Gvir respaldó la continuidad del proyecto, enfatizando la importancia de la gobernanza y la no tolerancia a la violencia.
A pesar de los intentos de contener las protestas, los disturbios estallaron en la región, con manifestantes drusos quemando neumáticos y lanzando piedras, fuegos artificiales y cócteles molotov contra las fuerzas policiales. La situación se volvió cada vez más violenta, con bloqueos de carreteras y enfrentamientos con la policía.
El Comisario de Policía de Israel, Kobi Shabtai, inicialmente ordenó detener las obras del aerogenerador debido a las protestas, pero posteriormente dio marcha atrás y permitió que continuaran. Esta decisión generó controversia y Ben Gvir desautorizó al Comisario de Policía, respaldando la continuación del proyecto.
Es importante tener en cuenta que el proyecto del aerogenerador forma parte de los esfuerzos de Israel por promover la energía limpia y reducir su dependencia de fuentes de energía tradicionales. El Ministerio de Energía ha destacado la idoneidad de los Altos del Golán para la energía eólica debido a su altitud y a los valles que son propensos a vientos fuertes.
Sin embargo, algunos propietarios que firmaron contratos de arrendamiento con la empresa responsable del proyecto, Energix, han expresado preocupaciones. Afirman que no se les informó adecuadamente sobre las consecuencias de tener turbinas en sus propiedades y se sienten presionados por contratos considerados draconianos. Además, el boicot impuesto a la empresa por líderes religiosos ha intensificado las tensiones.
Los Altos del Golán fueron arrebatados a Siria por Israel durante la Guerra de los Seis Días en 1967 y anexionados en 1981, aunque esta acción no fue reconocida internacionalmente hasta 2019. La comunidad drusa en esta región tiene un estatus de residencia israelí, pero muchos aún se sienten fuertemente vinculados a Siria. Sin embargo, cada vez más drusos solicitan la ciudadanía israelí.