El testimonio entregado al comité de investigación encabezado por el general de división (res.) Sami Turgeman reveló la existencia de un plan israelí para asesinar a los líderes de Hamás Yahya Sinwar y Muhammad Deif, frustrado en al menos dos ocasiones por la cúpula política, según informó Ynet.
De acuerdo con las declaraciones, el Mando Sur diseñó una amplia operación en 2022 y nuevamente en 2023, que contemplaba asesinatos selectivos, ataques contra infraestructuras militares y maniobras terrestres limitadas. Sin embargo, los dirigentes políticos evitaron su aprobación para impedir una escalada intencionada en la Franja de Gaza.
Las fuentes indicaron que funcionarios del Shin Bet respaldaron la propuesta, en especial por los graves ataques y los llamados públicos a la incitación promovidos por Sinwar. No obstante, la política del gobierno, según se explicó a los testigos, consistía en mantener el control de Hamás y preservar la calma en Gaza “a casi cualquier precio”.
Los testimonios también reflejaron que, aunque el Jefe del Estado Mayor recibió luz verde para la planificación inicial, el liderazgo político no adoptó una resolución definitiva, lo que impidió la ejecución de la operación. Los altos cargos que comparecieron ante el comité atribuyeron el fracaso a un malentendido que “llevó a la cancelación de iniciativas que podrían haber cambiado el curso de los acontecimientos”.
