El presidente de la Knéset, Amir Ohana, declaró que atacar a los líderes de Israel, la única democracia en Oriente Medio y el único Estado judío del mundo, representa un ataque directo a la justicia y el derecho universal a la legítima defensa.
Esta afirmación llega en respuesta a la decisión de la Corte Penal Internacional (CPI) de emitir órdenes de arresto contra el primer ministro Benjamin Netanyahu y el exministro de Defensa, Yoav Gallant.
Ohana calificó la decisión de la CPI como un “día oscuro en la historia del derecho internacional”, subrayando que el tribunal ha optado por politizar su mandato en lugar de defender los principios de justicia.
“La CPI se ha convertido en una herramienta de los terroristas y de quienes buscan deslegitimar el derecho de Israel a existir y defender a sus ciudadanos del terrorismo genocida”, expresó.
El presidente de la Knéset insistió en que los únicos crímenes contra la humanidad en esta guerra son los cometidos por Hamás el 7 de octubre. Afirmó que Israel no se dejará intimidar y, bajo el liderazgo de Netanyahu, continuará luchando en una guerra justa contra aquellos que buscan su destrucción.
“Las democracias de todo el mundo deberían reflexionar sobre el peligroso precedente que esta decisión sienta. Hoy es Israel; mañana podría ser cualquier nación que defienda la justicia y la libertad”, advirtió Ohana.
En respuesta a la orden judicial contra Mohammed Deif, líder de Hamás, Ohana bromeó diciendo que “no recibió el memorando”. Aunque Israel afirma haber matado a Deif en un ataque aéreo, Hamás no ha confirmado su muerte.
La CPI emite órdenes de arresto contra Netanyahu y Gallant
Por primera vez en la historia de la Corte Penal Internacional, se han emitido órdenes de arresto contra líderes de un país democrático, Netanyahu y Gallant, bajo cargos de crímenes de guerra relacionados con la guerra con Hamás en Gaza. La decisión fue tomada unánimemente por los jueces de la Sala de Cuestiones Preliminares I, a petición del fiscal Karim Khan.
Las órdenes de arresto implican que Netanyahu y Gallant podrían ser detenidos en más de 120 países miembros de la CPI. Además, el tribunal también ha emitido órdenes contra varios líderes de Hamás por su papel en la masacre del 7 de octubre de 2023, que dio inicio al conflicto.
La decisión convierte a Netanyahu y otros funcionarios israelíes en sospechosos de crímenes buscados internacionalmente, lo que podría dificultar las negociaciones para un posible alto el fuego en una guerra que ya lleva 13 meses.
Sin embargo, las repercusiones prácticas podrían ser limitadas, ya que ni Israel ni Estados Unidos son miembros de la CPI, y algunos de los líderes de Hamás ya han muerto durante la guerra. La CPI ha asegurado que no es necesario que Israel acepte su jurisdicción para que las órdenes sean válidas.
El presidente de Israel condena las órdenes de arresto de la CPI
El presidente de Israel, Isaac Herzog, calificó la emisión de las órdenes de arresto como un “día oscuro para la justicia y la humanidad”. Herzog criticó que la resolución de la CPI, tomada “de mala fe”, ha ridiculizado el concepto de justicia universal. Además, señaló que esta decisión ignora la situación de los 101 rehenes israelíes retenidos por Hamás en Gaza y el uso de palestinos como escudos humanos por parte del grupo terrorista.
El presidente Herzog también recordó que Israel tiene el derecho y el deber de defender a su pueblo tras el ataque brutal de Hamás, resaltando que el Estado de Israel sigue el derecho humanitario internacional y trabaja para proteger a su población civil.
Al respecto, Herzog afirmó que la CPI ha “elegido el lado del terror y el mal sobre la democracia y la libertad” y acusó al tribunal de usar el sistema de justicia como un “escudo humano” para los crímenes de Hamás. Finalmente, pidió “verdadera claridad moral” frente a las acciones del régimen iraní, que amenaza con desestabilizar la región y el mundo.